ALICANTE. El expresidente de Elche y abogado Diego García inicia una nueva etapa en el Badajoz, club cuyo primer equipo milita en la Primera RFEF.
Experto en Derecho Deportivo, que presidió la entidad franjiverde desde la primavera de 2016 al verano de 2019, pilotando la gestación y cumplimiento de un concurso de acreedores que evitó su liquidación, García ha intervenido en una operación por la que la mayoría accionarial del club blanquinegro cambia de manos y muy probablemente pasará a ser nuevo secretario consejero, además de asesor jurídico externo de la entidad.
Como "un grupo heterogéneo de profesionales del mundo del fútbol que quieren trabajar con tranquilidad y sin presiones" define García a la nueva propiedad del Badajoz, club que no atraviesa su mejor momento a todos los niveles, empezando por el económico y el social.
En un comunicado, la entidad pacense anunciaba este viernes que "ante la urgente situación de necesidad" y "respondiendo a la voluntad social", el empresario sevillano Joaquín Parra había "transmitido su paquete accionarial". En el comunicado se explicaba que el anterior había optado por la oferta que "mayor importancia al futuro del Badajoz y a su crecimiento deportivo" y "mayor experiencia atesora en la gestión de clubes de futbol", mientras que el precio de compraventa y las garantías para la familia Parra habían sido aspectos secundarios.
La compraventa de las acciones queda supeditada "a la preceptiva autorización del Consejo Superior de Deportes así como a la autorización y levantamiento de la prohibición de disponer del Juzgado de Instrucción nº 6 de Málaga", pero García ha contactado ya con el director general del Badajoz para transferir "los fondos suficientes para urgencias y los viajes de este fin de semana", antes de que el nuevo equipo de gestión se desplace a Badajoz para tomar contacto con los trabajadores y "comenzar a trabajar intensamente, acometer las medidas oportunas y aportar los recursos necesarios que permitan la continuidad de la empresa .
