"El diablo mete la cola"

ALICANTE. "El diablo mete la cola" es un dicho popular argentino que viene muy bien para condensar lo sucedido este viernes alrededor de la figura de Sergio León.

El delantero palmeño se estrenaba con el Eibar con gol a los dos minutos de saltar al terreno de juego, día y medio después de firmar por el club azulgrana tras haber rescindido contrato con el Elche. 

El tanto de León, en el primer balón que tocaba y que terminaba valiendo tres puntos para su nuevo equipo (que arranca el fin de semana como segundo con 41 puntos), llegaba horas después de que hubiese sido protagonista involuntario de buena parte de la rueda de prensa de Sebastián Beccacece. 

En su comparecencia previa a la cita dominical en Andorra, el técnico rosarino ampliaba las razones que le habían llevado a concluir que Sergio León no tenía sitio en su equipo. La exposición de Beccacece gozó de la riqueza de la que había adolecido la que hizo sobre el mismo particular 15 días antes, después de enseñarle la puerta de salida al futbolista: por ejemplo, señalaba que el delantero necesita estar rodeado "de jugadores con otro criterio posicional, con otra pegada, con otra técnica, que le hagan llegar con otra técnica el balón porque es un goleador nato", compañeros que en su opinión no se encuentran en un Elche que tiene entre sus banderas "la intensidad, la presión al correr" y sí en su nuevo equipo.

"Es un gran profesional, se ha comportado de maravilla, se ha despedido de todos los compañeros y hemos tenido charlas con él largas, profundas, directas y amables, como tiene que ser la relación. Lo intentó él y lo intentamos nosotros", proseguía dentro de un penúltimo cambio de tercio precedido de una sopa de datos que, para ser sinceros, no son exactos (ni han transcurrido 15 jornadas desde que se lesionó Sergio León ni en ese lapso de tiempo el delantero ha estado sobre el verde 44 minutos -salvo que se incluyan los dos encuentros de Copa del Rey, en los que además anotó un gol- ni el equipo franjiverde ha sumado los mismos puntos que el Leganés), pero sí reflejan que el Elche sin Sergio León no se ha caído, más bien todo lo contrario.

La incompatibilidad del palmeño con "la realidad" del equipo es, en definitiva, lo que había llevado a prescindir de sus servicios. Una decisión que entendía como la "más sana y noble para el grupo", ampliaba Beccacece antes de cambiar el hilo fino por el grueso para coser su argumentación, algo que no domina y con lo que pierde más que gana, aunque tenga su público.

El entrenador franjiverde volvió a ponerle la proa a parte del entorno, de los medios. No fue solo a cuenta del tema de Sergio León, pero acusó a algunos realizar análisis "mediocres" en relación con el mismo e incluso "inventar": "No hubo ningún problema, está todo muy bien; fuimos muy claros y transparentes y él también ha sido muy claro, muy transparente y muy profesional", remarcaba, mostrándose especialmente molesto con que se pusiera en duda la profesionalidad de Sergio León o se le adjudicara a él el hacerlo y con reducir el asunto a que un rival directo considere refuerzo a un futbolista con el que él no cuenta.

Aunque seguro que al futbolista le causó satisfacción que Sebastián Beccacece se refiriera a él en los términos que lo hizo este viernes, lo debió hacer más su gol.