ALICANTE. Como la hostelería, el comercio de la provincia de Alicante también mueve ficha para ajustarse a las nuevas condiciones impuestas por la pandemia del coronavirus y poder enfrentarse al futuro escenario de la desescalada. Así, ya se comienzan a intensificar experiencias de reconversión digital a la vista de que, al menos en los próximos meses, seguirán imperando restricciones para el desarrollo de su actividad (entre ellas, las limitaciones de aforo en los establecimientos de venta).
En primer término, la mayoría de las pymes del sector se ha centrado en cubrir su principal prioridad: arbitrar una solución para sus gastos fijos. Se trata de los pagos de las rentas de alquiler de los locales en los que se encuentran sus negocios, para los que el Ejecutivo central no había regulado ninguna solución hasta este martes, y de atender los pagos a sus respectivos proveedores en un momento en el que carecen de todo ingreso.
Por lo pronto, en ambos casos, se ha alcanzado una salida similar. Según fuentes de la Federación Alicantina de Comercio (Facpyme), el 90% de los comerciantes ha conseguido negociar acuerdos de aplazamiento de las rentas de alquiler durante al menos dos primeras mensualidades: marzo y abril. De este modo, las cantidades correspondientes a esos alquileres quedan prorrateadas en los meses sucesivos. En el 10% de los casos restantes, se ha conseguido una reducción de los importes de esas rentas, después de que los caseros hayan mostrado sensibilidad respecto a la excepcionalidad de la situación. Es más, en algún caso puntual incluso se han acordado condonaciones de dos meses, según las mismas fuentes.
Por lo que respecta a los pagos con proveedores, aunque se han registrado casos de devolución de efectos, también se ha apostado mayoritariamente por aplazar los giros bancarios para flexibilizar los gastos derivados de los suministros. "Si lo normal es que se produzcan a 30 o 60 días, se están renegociando para que puedan producirse a 90 o 120 días", según explica el secretario general de Facpyme, Francisco Rovira.
Con esa doble medida, el sector habría conseguido un primer alivio que está siendo más complejo encontrar en los mecanismos puestos en marcha por el Ejecutivo central para abrir vías de financiación extraordinaria, como los créditos ICO. En función de las experiencias recabadas por Facpyme entre las cerca de 10.000 pymes que representa en el conjunto de la provincia, las condiciones no están resultando asequibles para un sector compuesto fundamentalmente por autónomos (el 98%), puesto que para optar a esas líneas de crédito (prácticamente agotadas) se fijaban comisiones de apertura del 0,50% con un interés del 1,5% durante cinco años y uno de carencia, además de un 1% por cancelación anticipada.
El sector también flexibiliza los pagos con sus proveedores para acordar giros a 90 o 120 días en lugar de cada 30 o 60
Esas dificultades, junto a la incertidumbre que todavía persiste sobre la duración de las restricciones, amenaza la supervivencia de muchos negocios. De hecho, Facpyme ya dispone de estudios preliminares sobre las expectativas del sector a partir de un sondeo realizado entre 180 establecimientos de un municipio de tamaño medio de l'Alacantí, en el que se refleja que un 40% de las tiendas no subirá la persiana en cuanto se levanten las restricciones acordadas con la declaración del Estado de Alarma.
No obstante, lo cierto es que también se están gestando soluciones alternativas, como la apuesta por la digitalización de los negocios para activar la venta on line compatible con la continuidad de las tiendas físicas. En esta línea, ya se están poniendo en marcha experiencias como la que está desarrollando, por ejemplo, la Asociación de Comerciantes de Sant Joan d'Alacant: una plataforma digital a modo de marketplace que agrupa a los establecimientos asociados, facilita la conexión con sus respectivas páginas web y permite efectuar compras con servicio de reparto incluido (concertado también con una empresa local). El presidente del colectivo, Manuel Nieto, explicó que, por el momento, la plataforma agrupa a los cien establecimientos que conforman la asociación, aunque la intención es poder abarcar al conjunto de los comercios del municipio, con el impulso del Ayuntamiento. Es más, la previsión del equipo de Gobierno (PSPV y Cs) es utilizar esa plataforma como base "para contribuir a la digitalización de todos los negocios y configurar un auténtico centro comercial abierto; un objetivo en el que veníamos trabajando desde el inicio del mandato", según explicó el concejal de Dinamización Económica, el socialista Antoni Manel.
La asociación de comerciantes de Sant Joan conecta a 100 primeros establecimientos en su plataforma de venta digital con reparto a domicilio
La previsión es que la plataforma, denominada Comercio de Sant Joan, pueda estar en funcionamiento en las próximas semanas, en lo que constituye un paso más respecto a otras iniciativas ya desarrolladas en otros municipios de la provincia. Entre ellos, la propia capital, con la plataforma habilitada por el Ayuntamiento de Alicante en la que se difunde la oferta de más de 150 establecimientos comerciales que prestan servicio de reparto a domicilio. En este caso, no se contempla la posibilidad de compra directa, como sí sucede en el caso de la iniciativa desarrollada por la Asociación de Comerciantes de Sant Joan d'Alacant. Y a esos proyectos se unen otros también impulsados desde el propio sector, como la iniciativa "Yo Compro en Alicante", desarrollada por un conjunto de establecimientos integrados en un grupo de Facebook, en el que se aglutinan comercios o empresas que mantienen el servicio a domicilio. El objetivo es posicionarse fácilmente entre el público de la ciudad susceptible de consumir los artículos de estas empresas. El grupo, que en pocos días cuenta ya con más de diez miel miembros, utiliza también el hastag #YoComproEnAlicante para identificar a las empresas disponibles y a sus productos.