ORIHUELA. El Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela está a un paso de ser nombrado como tribunal consuetudinario, pero se ha quedado a las puertas del Congreso de los Diputados, paso para su aprobación definitiva, por la disolución de las Cortes de cara al proceso electoral. Justo el reconocimiento "consuetudinario y tradicional" al Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela y los pueblos de su marco y el del Comuner o del Rollet de l'Horta de Aldaia (València) se iba a discutir en una sesión del Congreso de los Diputados en marzo, constaba en el orden del día, pero el adelanto electoral supuso una disolución más temprana de las Cortes y esta aprobación queda en el tintero hasta la próxima legislatura.
Por este motivo, desde la Asociación de Juristas Valencianos, impulsores de esta propuesta, pidieron a los grupos políticos que no olviden ni dejen en el tintero esta propuesta, que ya ha obtenido el reconocimiento, por unanimidad en Senado y, previamente, en Les Corts. Mantienen que, algo que recoge un consenso tan amplio, no debería alargar su aprobación y que se vea hecha realidad en los próximos meses, ya con nuevas cámaras formadas. El objetivo, afirman, es que no vuelva a quedar en el olvido ni en un cajón como, hasta hace unos meses, se había mantenido esta propuesta. Aquí es donde se debería plantear un Proyecto de Ley de modificación de la ley Orgánica del Poder Judicial.
El Pleno del Senado ya aprobó por unanimidad en diciembre de 2019 su visto bueno para su reconocimiento para facilitar la participación de los ciudadanos en esa administración de justicia y añadieron que son "símbolos" que contribuyen a la cohesión y velan por los oficios tradicionales. La propuesta está incluida como proposición de ley de modificación de la ley orgánica del Poder Judicial y cuya toma en consideración fue aprobada en la Cámara alta.
La demanda no es nueva, puesto que ya hace cerca de seis años hubo movimiento por parte de esta asociación de abogados y otros profesionales de la Justicia para lograr este objetivo. Así, consiguieron que, primero el pleno de la Diputación, en 2013, aprobara su propuesta con acuerdo de los grupos popular y socialista y que, luego por unanimidad, en 2014, el pleno de Les Corts admitiera su propuesta y decidiera elevarla hasta el Congreso de los Diputados.
No obstante, el proceso entonces lo dejó en el limbo legal bloqueado, quizá por falta de voluntad política o quizá por algún otro motivo que, desde la Asociación de Juristas Valencianos dicen desconocer y querer reactivar para que culmine en la figura legal deseada. Es algo que no quieren que vuelva a repetirse, ahora que la propuesta ha cogido impulso.
Para los impulsores de la propuesta, el reconocimiento del Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela como tribunal tradicional y consuetudinario debería ser "motivo de orgullo para los alicantinos y también para los valencianos, porque este tipo de tribunales favorecen la participación ciudadana y constituyen verdaderos tesoros repletos de patrimonio histórico, como depositarios ancestrales de una identidad local y regional relevantes para la cultura, las costumbre y la cohesión social".
Además, apuntan a que la reivindicación no solo atañería a Orihuela, sino también a toda la zona del Segura y para la Comunidad Valenciana al dotarla de más independencia y seguridad jurídica. "Pensamos que esta reivindicación de los oriolanos no debería perderse en la burocracia".
Si consiguieran su objetivo, también lograrían que el Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela pudiera impugnar resoluciones a tribunales, y las resoluciones propias serían irrevocables, salvo por el Tribunal Constitucional.