El bipartito de Alicante ajusta el presupuesto para liberarse de deuda frente al bloqueo de su 'hucha'

ALICANTE. Dicho y hecho solo cuatro días después. El bipartito de Alicante, compuesto por PP y Cs, ha aprobado este martes en Junta de Gobierno una propuesta de la que será la tercera modificación de crédito del presupuesto municipal de 2020 que no solo prevé el pago de las operaciones pendientes de crédito (OPA). El principal objetivo del acuerdo es la cancelación de toda la deuda municipal pendiente con las entidades de crédito, mediante la amortización anticipada de 18,9 millones.

La propuesta de acuerdo, que todavía debe pasar el filtro de la comisión de Hacienda, este viernes, y del pleno de la corporación, el próximo jueves, supone el cumplimiento del anuncio formulado la semana pasada por el alcalde, el popular Luis Barcala, al término de la sesión extraordinaria en la que se aprobó el dictamen con 105 medidas para la recuperación de la ciudad, con el fin de paliar los efectos de la crisis del coronavirus. En ese momento, el primer edil advirtió que estaba dispuesto a usar la parte del remanente municipal de crédito -el dinero no gastado del presupuesto de 2019- para borrar la deuda municipal en el caso de que el Ejecutivo central persistiese en su intención de hacer uso de los ahorros de todos los ayuntamientos. Barcala también ha venido defendiendo en los últimos dos meses a través de la FEMP, al pertenecer a su junta directiva, que el Gobierno libere el remanente y lo deje en manos de los ayuntamientos, al ser la primera línea de batalla contra los efectos sociales y económicos de la pandemia y los principales conocedores de las necesidades de sus vecinos. 

Así, la decisión sobre la cancelación de la deuda se ha precipitado ahora sin esperar a que el Gobierno concrete de manera definitiva qué uso se podrá dar a esos fondos municipales, después de que la Unión Europea haya llegado a un acuerdo sobre las ayudas que se distribuirán al conjunto de los estados miembros para combatir los efectos de la crisis del coronavirus. 

En todo caso, fuentes municipales han destacado, a través de un comunicado, que -sea cual sea la decisión del Ejecutivo- la cancelación de la deuda permite que el Ayuntamiento deje de estar sometido a la Ley de Estabilidad Presupuestaria, de modo que "podrá tener más libertad para usar su remanente de tesorería, que ahora estaba condicionado a destinar una parte del dinero precisamente a amortizar operaciones crediticias".

El ajuste contable se suma a las dos modificaciones presupuestarias ya adoptadas hasta ahora. Como ha informado Alicante Plaza, la primera, por valor superior a los tres millones, se destinó a cubrir los efectos sociales del covid y la segunda, de cinco millones de euros, se dedicó a dotar la línea de ayudas a autónomos y pequeños y medianos comerciantes y empresarios. Ahora, esta tercera modificación de crédito contempla más de 700.000 euros para apoyar al turismo y el comercio de la ciudad de Alicante, a través de diversas ayudas y campañas de promoción que tendrán como objetivo relanzar la actividad económica, que ha resultado muy duramente castigada a consecuencia del covid-19, según ha añadido el portavoz del equipo de Gobierno, Antonio Manresa (Cs), en su comparecencia para informar sobre los asuntos tratados en la Junta Local.

Por su parte, el propio Barcala ha destacado, a través de un comunicado, que "en poco más de dos años, es decir, desde que el tripartito dejó de gobernar la ciudad de Alicante, hemos sido capaces de cancelar el plan de ajuste, bajar los impuestos, especialmente el IBI, que bajó en 2019 un 5% y mantiene esa reducción en 2020, y ahora eliminamos toda la deuda que teníamos con los bancos". "Los alicantinos pueden tener la seguridad de que con este equipo de Gobierno, la ciudad y la búsqueda de soluciones a los problemas que tenemos siempre será lo primero y que han quedado atrás los tiempos en los que las peleas y la paralización del tripartito eran la única noticia de este Ayuntamiento", ha apuntado.

Las reacciones de la oposición

Para que la propuesta prospere, debe quedar avalada por mayoría simple (más votos a favor que en contra). El bipartito dispone de 14 votos (la suma de los 9 ediles de PP y los 5 de Cs) por lo que requiere de la abstención o del voto a favor de algún otro grupo político. No obstante, por el momento al menos las tres fuerzas del eje progresista han mostrado sus reticencias respecto a la iniciativa, sobre la que, según han manifestado sus representantes, no se les había informado ni consultado previamente.

El portavoz socialista, Paco Sanguino, ha señalado que "la pretensión de liquidar la deuda antes que ayudar a cientos de familias por la pandemia nos parece un acto ventajista más de Barcala. Más sin una decisión definitiva del Gobierno sobre el remanente de los municipios, más sin dialogar con el resto de la corporación. Es un acto oportunista por la noticia de la aprobación del fondo europeo. Otra muestra de que Barcala se dedica únicamente a hacer oposición a otras instituciones y no a ser Alcalde de Alicante".

Su homólogo de Unides Podem, Xavier López, ha apuntado que la propuesta supone "la vuelta del gobierno de la opacidad anterior a la pandemia del coronavirus, que no consulta nada con la oposición". "Entendemos que esto va a afectar a la negociación de las medidas del covid y no esperábamos una noticia como esta sin habernos reunido en la junta de portavoces", ha dicho. "Es una mala noticia que el equipo de Gobierno vuelva a sus andadas y tome decisiones en caliente; nos tememos que la puesta en marcha de las medidas pactadas sobre el covid de modo que no haya dinero para poderlas ejecutar", ha recalcado. En esta línea, ha considerado que antes de que se hubiese adoptado esta decisión, se debería haber aguardado a que el Ejecutivo Central concretase cuál puede ser el uso del remanente municipal. Así, ha reprochado que no se haya informado sobre decisiones "que son cuestiones de ciudad". "Así es muy difícil buscar ningún tipo de unidad", ha concluido.

Por último, el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, ha asegurado estar sorprendido "por alguna de las cuestiones que se han aprobado hoy y lo primero es decir que seguramente si yo fuera Gobierno central si a lo que va a dedicar el dinero el Ayuntamiento Alicante, el bipartito es a la escuela taurina y los toros me pensaría mucho el dinero que envió a la ciudad de Alicante, y esto parece que es un capote al apoyo que la extrema derecha ha dado durante estos meses en la aprobación presupuestaria". En esta línea, ha considerado que "la emergencia social que debe ser la prioridad, la lucha contra el hambre que están pasando algunas familias, que no es que no llegan a final de mes, es que no llegan a final día debería ser la prioridad en estos momentos aunque vemos cómo recortar la deuda municipal o dedica el dinero la escuela taurina es la prioridad de este bipartito de derechas. Y es absolutamente grotesco que en estos momentos se aprueben cosas así por parte del bipartito de derecha".

Respecto al tema de cancelación de la deuda, ha señalado que "creemos que no es momento, creemos que se tiene que seguir reivindicando y negociando con Estado Central que pongan el remanente de los ayuntamientos a disposición de los gobiernos municipales. Esta es la posición que está reivindicando Compromís en el Congreso con Baldoví, en les Corts Valencianes, en el Ayuntamiento de Alicante, pero no es momento  de destinar dinero  al pago de la deuda y esas fueron las recetas del año 2008, del austericidio, y nos llevaron a donde nos llevaron". 

"En estos momentos hay que poner el máximo volumen de dinero público a dos cosas básicamente: a atajar la emergencia social y poder ayudar a familias más vulnerables, a que no se nos cae una tercera parte de la población cómo pasó la crisis del 2008… Y después reactivar la actividad económica, a ayudar a nuestros sectores productivos, al comercio, la hostelería, al turismo… a que haya  dinamismo comercial de esta ciudad y sobre todo a que podamos proteger empleo que va a ser una cuestión sagrada siempre, pero más en estos meses, dónde vamos a sufrir. Y eso parece que lo ha entendido todo el mundo, la Unión Europea llegó ayer a un acuerdo en este sentido, lo han entendido todas administraciones, menos Ayuntamiento Alicante. El señor Barcala es el único que no entiende que la respuesta a esta crisis tiene que ser diferente a la respuesta del año 2008 y apuesta por cancelar deuda cuando lo que se tiene que apostar es por políticas expansivas desde lo público", ha añadido.

En este sentido, ha apuntado que "la Federación Española de Municipios y Provincias  todavía tiene abierta  la negociación con el Estado, no ha dado por  cerrada esa negociación y no ha fijado todavía posición respecto a la propuesta del gobierno central y esperemos que se siga avanzando la negociación". "Obviamente estamos en contra de los criterios que en estos momentos está poniendo  encima de la mesa el Gobierno central  pero la respuesta no puede ser tirar la toalla y cancelar una deuda en un  Ayuntamiento que tiene deuda técnica y que prácticamente es insignificante. Y si eso además le añadimos la guinda de los toros, pues ya sencillamente no entendemos nada".

Así, ha avanzado que "va a ser complicado" que Compromís respalde la propuesta. "Viendo que el bipartito toma decisiones sin consultar a nadie, sin sentarse con nadie va a ser muy complicado llegar a acuerdos. Que no cuente con nosotros para dar  y aprobar estos capotazos a la extrema derecha, mientras la emergencia social sigue en un segundo término y cancelamos deuda en un Ayuntamiento saneado que tiene una deuda técnica", ha concluido.