ELCHE. Como estaba previsto, el Ayuntamiento de Elche ha aprobado el pago de los famosos 540.000 euros que llevan siendo objeto de noticia y reacciones en los diferentes partidos políticos durante la pasada semana. Tras darse a conocer la sentencia impuesta por el juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Elche por el cual se condenaba al Consistorio al pago de unas obras realizadas por Ilidexsa que no se abonaron, previas críticas durante los días siguientes y en la propia sesión plenaria de ayer, se realizará una modificación presupuestaria para hacer frente a este pago.
La orden judicial de pago, de 430.000 euros, más los intereses, se ha ejecutado ahora tras la denuncia interpuesta por la mercantil a la administración local en 2012. Las facturas se presentaron un año antes, en 2011, por unos trabajos realizados a cargo de la concejalía de Fiestas, entonces regentada por la ex edil socialista —y actual asesora municipal— Blanca González. Ahora se procederá a su pago con una modificación presupuestaria con el sobrante de partidas de 2017.
Una situación que tras conocerse, desencadenó críticas de todas parte, la más dura la del Partido Popular, que pidió el cese de González y que se recurriera la sentencia, algo a lo que el gobierno se ha opuesto. Por parte de Ciudadanos, señalaron en el pleno que esto “es una muestra de la forma de gobernar este municipio de la legislatura 2007, y del PP en la anterior”, en referencia a la negación del gobierno de Mercedes Alonso de pagar estos servicios en su legislatura. Asimismo, la formación naranja también recordó que en 2016 se llevó a pleno otra modificación presupuestaria, referente a una factura de Urbaser, en la que Intervención señalaba las irregularidades del expediente. Desde Ciudadanos aseveraron que no van a permitir esta forma de gobernar como “saltarse la ley de contratos del sector público, contratos a dedo”. Y solicitaron al contrato de Ilidexsa, y en el caso de que hubiera irregularidades, pedirán responsabilidades.
Más contundente se expresó el portavoz popular Vicente Granero, que calificó la situación de “extremadamente grave”. Reveló que la oposición no tiene la sentencia y que el tripartito “esconde lo que no le interesa”, y señala que en ese periodo se cometieron irregularidades, despilfarros, y una deuda que aún impide al ayuntamiento funcionar con normalidad. “Años después aún llegan sentencias. Sólo hay una responsable, Blanca González, que se saltó todo lo que establece la ley para contratar, salvo si había alguien por encima que le obligaba. No había nada, encargos verbales y ningún informe técnico municipal que avalara el coste de los técnicos”. Por ello, incluso puso en duda que se realizaran los trabajos. En cualquier caso, pidió al tripartito que le reclamara esa cantidad a Blanca González y que se le destituyera como asesora municipal. Y pidieron a Ciudadanos que no fuesen ambiguos.
Por parte de los socialistas, a quienes toca el asunto, quisieron quitar hierro. Primero culparon al PP de que no pagaron cuando existió la oportunidad y que se les condena por el impago, “no por incumplir los trámites”, a los que dicen que la sentencia no hace referencia. En defensa de la edil, Ana Arabid explicó que es habitual que en los ayuntamientos se ejecuten proyectos sin consignación presupuestaria. Y puso de ejemplo que el PP generó en este tipo de trabajos varios cientos de miles de euros que se han ido pagando año después. Acusó al partido de Ru de intentar hacer beneficio político del tema.
Los socios de los socialistas, Compromís, que ya pidieron responsabilidades, explicaron que hay expediente —algo de lo que se quejó la oposición— porque no hay tramitación y pidió que no cuestionase que se hicieron los trabajos, pues están avalados por un juzgado. En cualquier caso, señalaron que González debería dimitir, y que si por ellos fuera, ya hubiese sido cesada, y apuntó Mireia Mollà que no es su responsabilidad hacer que la actual asesora dimita. Finalmente, votó a favor del pago el tripartito, con el voto en contra del PP y la abstención de Ciudadanos. Falta por ver qué pasará con el futuro de la ex edil socialista y concejal de Fiestas, a día de hoy asesora municipal de los socialistas.