ALICANTE. Nadie dijo que fuese a ser fácil. Ni tampoco asequible. Pero, como mínimo, ya se tiene un primer diagnóstico real sobre la inversión que debería materializarse para que el edificio promovido por la extinta patronal de la provincia de Alicante, Coepa, como centro de oficios pueda tener el destino para el que fue concebido: impartir cursos de capacitación profesional.
En concreto, el informe de valoración trazado por la Conselleria de Economía tras la inspección técnica girada al edificio el pasado mes de octubre concreta que debería acometerse un desembolso mínimo de 5,5 millones para completar sus obras y procurar su acondicionamiento. Se trata de una cuantía que el departamento autonómico se comprometería a asumir a cambio de que el Ayuntamiento ampliase el plazo de cesión de la parcela en la que se asienta, de titularidad municipal y situada en el barrio de Babel.
Ese es, hasta ahora, el principio de acuerdo alcanzado entre los representantes de las dos administraciones, tras el último encuentro celebrado entre el el secretario autonómico de Empleo, Enric Nomdedéu, y la edil de ese mismo departamento, Mari Carmen de España. En esa cita, se aplazó la redacción definitiva del convenio de colaboración previsto entre las dos partes hasta el momento en el que se concretasen los términos económicos del acuerdo. Así, según fuentes consultadas ese estudio ya se habría facilitado al Ayuntamiento con el propósito de que puedan acelerarse las negociaciones pendientes para cerrar los términos de la gestión compartida del edificio.
En esa negociación, deben perfilarse las nuevas fechas de cesión del solar. Hasta ahora, el acuerdo alcanzado con Coepa, que sigue vigente después de que el inmueble pasase a manos del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), prevé que tanto la parcela como el edificio reviertan en el Ayuntamiento en el año 2031. Ahora, se aspiraría a poder extender ese plazo por un periodo de 50 años adicionales, según fuentes consultadas.
Con esa inyección, se aspira a que pueda prolongarse el plazo de cesión del solar municipal en el que se ubica el inmueble
No obstante, también se debe concretar ahora otra de las condiciones requeridas para que acabe fraguando el pacto: el presupuesto concreto que el departamento autonómico estaría dispuesto a destinar, a través de Labora, para poner en marcha los cursos de formación profesional, al margen del gasto en su equipamiento (ya contemplado en esos 5,5 millones).
Por lo demás, lo cierto es que las dos administraciones compartirían el enfoque que se debería dar a la gestión de esos cursos. Conselleria y Ayuntamiento coinciden en que la formación debe orientarse hacia la demanda de mano de obra del tejido productivo local. Y, además, que debe ponerse énfasis en la nueva economía digital para fomentar el emprendimiento y diversificar la actividad, en base a los objetivos que persiguen iniciativas como el Distrito Digital o Alicante Futura, de modo que se evite la excesiva dependencia en el sector terciario.