CORNELLÀ. Hacía poco más de un cuarto de hora que su equipo había pasado de tener pie y medio en la cuarta categoría del fútbol español a ver como se multiplicaban sus opciones de jugar en la Segunda B-Pro en la 2020/21, pero ese giro favorable de los acontecimientos tampoco hizo que se saliera de su ya habitual guion. Es más, con esa tranquilidad que por momentos exaspera, Manolo Díaz iniciaba su valoración del partido que acababan de ganar sobre la bocina permitiéndose incluso el lujo de bromear (a su manera, claro) sobre el "nerviosismo" que, a su juicio, rodea al equipo.
Para el técnico madrileño del Hércules el resultado era más que justo y es que, como él mismo destacaba, incluso con la victoria parcial del Cornellà reinando en el marcador los suyos estaban haciendo méritos para ganar: "Hemos jugado un muy buen partido desde el minuto uno y era increíble que fuéramos perdiendo por una virtud de Agustín Medina; hubiera sido inmerecido no sacar nada, pero en el fútbol lo que cuenta es el resultado", decía el preparador madrileño, que se refería al maltrecho césped del Municipal de Cornellà como "un campo propicio para que pasen muchas cosas, a favor y en contra" y destacaba que los suyos las había buscado, especialmente aprovechado las acciones a balón parado.
Díaz, que abogaba por "aprovechar la oportunidad adicional e intentar ganar el sábado a la Llagostera y que poco a poco se vaya viendo el sol", se mostró especialmente contrariado con el hecho de que hubiera público en las gradas y, especialmente, el número: "No se está jugando en las mismas condiciones", sentenciaba.
