ALICANTE. Si hay un camino que conocen las empresas tecnológicas alicantinas Mindden y Aire Networks es el de la innovación y la digitalización en la industria, tanto por experiencia propia como en la consultoría. Por este motivo, el Foro de Alicante Plaza "Innovación y Transformación Digital" que tuvo lugar en Distrito Digital recogió el diálogo 'Telecomunicaciones y Digitalización' donde, tanto Jesús Ruiz, General Manager de Grupo Mindden, como Carlos Cortés, director comercial, de marketing y clientes de Aire Networks conversaron con el redactor jefe de Alicante Plaza, David Martínez, sobre las resistencias al cambio, las competencias ideales o los beneficios de la transformación en las empresas. Entre otros consejos, tener una mentalizad abierta a la hora de dirigir un negocio, capacidad de adaptarse y no perder el tren de la innovación fueron algunas de las claves más destacadas para llevar a buen puerto a una compañía.
De este modo, a la pregunta de cuáles son las competencias necesarias a la hora de caminar a la transformación digital en una empresa, Jesús Ruiz apuntó que es importante "un background técnico", pero también lo es "tener grandes habilidades de comunicar, de explicar a diferentes actores y departamentos de la organización, en lenguaje terrenal, lo que a los técnicos les cuesta hacer comprensible". Para Carlos Cortés, "es necesario que la plantilla y los empresarios sean conscientes de la importancia del cambio. Es difícil transmitirlo a todo el mundo en compañías donde conviven varias generaciones y una estructura multiperfil".
En cuanto a los consejos para vencer las resistencias a las hora llevar a cabo una transición digital para las empresas, ambos ponentes fueron tajantes: o se inicia esa transformación, o la empresa no tendrá futuro. "Es estar o no, en un mercado cambiante, quien no acometa esa transformación, no se subirá al tren. A veces es difícil convencer a los directivos de esa necesidad", apuntaba Ruiz. "La Revolución Industrial en el siglo XIX no fue una opción. Subirse al carro es la única opción, o se sube o se desaparece. Es difícil llevar a cabo el cambio", aseguraba Cortés.
Y, además, en ese cambio, quienes dirigen las firmas han de estar convencidos desde el comienzo. Para el director comercial, de marketing y clientes de Aire Networks, "lo más difícil es transformar a empresas que nacieron sin ser digitales, sobre todo a las más grandes, con una mayor resistencia al cambio". Algo a lo que el General Manager de Grupo Mindden añadió que "es complejo y también es necesario tener la capacidad económica para acometer esas inversiones, pero con la pandemia hemos visto que hay que digitalizarse para continuar, no hay otra. Ahora hay posibilidad de acogerse a planes de la administración".
En el foro, que se ha realizado en colaboración con la Consellería de Innovación, Verne Group y FacePhi, también se habló de beneficios. "Dicen que la diferencia entre un sueño y la realidad es un plan de acción. Dar pasos con microactos y no ser excesivamente ambiciosos es una buena opción", señalaba Carlos Cortés. "La innovación es un medio de ejecutar la producción de servicios y productos que desarrolla la propia compañía, no sólo es necesario un plan de transformación, también que esté vivo", apuntaba el representante de Aire Networks en este foro. Así, consideró que hay sectores más o menos estables y que la empresa ha de adecuarse a los clientes y sus necesidades a un ritmo adecuado.
El cambio de mentalidad ha de darse, según Jesús Ruiz, y así será posible mejorar la competitividad. "El talento existe y está, lo difícil es retenerlo, hacer atractiva la empresa, empoderar a esa persona y ponerla en el centro del proceso. A veces tenemos la idea de que se innova desde el área de I+D, pero es Recursos Humanos la que debe ir de la mano". Según Cortés, "ahora el sentido de pertenencia a la empresa es diferente, es más difícil fidelizar a la plantilla".
Asimismo, entre ejemplos concretos de la transformación o la innovación, se debatió sobre el internet de las cosas, la medión de consumos o los datos, entre otras claves. "Según un estudio, en 2025 se calcula que habrá 25.000 millones de dispositivos conectados a internet", según Ruiz. Con ello, es relevante el concepto de la recopilación de datos y su transformación en información. "No hay nada menos concreto que el concepto de internet de las cosas", apuntaba Cortés. "Es el hecho de añadir inteligencia a los productos y lo más complejo será la obtención de datos que ofrezcan. Si tenemos robots interconectados y somos capaces de aplicar esa actividad a algo concreto, eso serña la revolución de las cosas".