ALICANTE. El Centro de Inteligencia Digital de la Provincia de Alicante (Cenid), impulsado por la Diputación de Alicante, la Universidad de Alicante (UA) y la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH), con el foco puesto en la transformación digital de la provincia, ha llevado a cabo una investigación basada en la mejora de los servicios para la implantación de tecnologías Smart City en ocho ayuntamientos de la provincia de Alicante. Esta iniciativa, llevada a cabo por investigadores de la UA, busca fomentar la transformación digital en los municipios de menos de 1.000 habitantes mediante la implantación de soluciones de Smart City o Ciudades Inteligentes.
Tras la aplicación de elementos habilitadores propios de la transformación digital, tales como la IA, el análisis Big Data o la red de comunicación de alta velocidad que han convertido a las ciudades en espacios inteligentes, surge la necesidad de acercar todos estos avances a aquellas poblaciones que, bien por su localización demográfica, su falta de presupuesto o recursos técnicos, carecen de un sistema informático moderno. Con el objetivo de contribuir al avance de estas poblaciones y conocer la situación actual de los ayuntamientos de los municipios de la provincia, investigadores de la Universidad de Alicante han llevado a cabo un estudio de campo previo que mostró la brecha digital existente en aquellos ayuntamientos de poblaciones con menos de 1.000 habitantes.
"De los 141 ayuntamientos que componen la provincia, 50 tienen menos de 1.000 habitantes, lo que representa una parte muy importante del ecosistema alicantino. A través de un cuestionario detallado, nos dimos cuenta que estos ayuntamientos presentaban necesidades de transformación digital urgentes, debido a su tamaño o recursos económicos, que debían que ser tratados a la mayor brevedad posible", señala Ángel Lloret, responsable del proyecto.
Con el propósito de implantar verticales Smart City a través de modelos living-lab en estos municipios, se ha llevado a cabo el desarrollo de un plan de acción capaz de disminuir la brecha digital de estas poblaciones y promover la implicación de los pequeños ayuntamientos en todos los procesos de transformación digital. "Llevar a cabo esta iniciativa a través de modelos Living-lab posibilita testear las soluciones propuestas, medir su impacto y, por tanto, su usabilidad tanto en la población como en los municipios seleccionados, lo cual convierte todo este proceso en una labor mucho más efectiva y fiable", señala el investigador.
Asimismo, el proyecto fija tres acciones concretas a seguir que servirán como hoja de ruta durante todo el proceso y ejecución de acciones a desarrollar:
"Nuestros municipios conocen cuáles son los recursos necesarios para establecer estos servicios o verticales Smart City, sin embargo, las dificultades digitales que estos presentan impiden que se puedan desarrollar correctamente. A través de este estudio buscamos que los ciudadanos también puedan tener acceso a todas estas facilidades o labores diarias administrativas que se pueden hacer por medios digitales sin tener que desplazarte al ayuntamiento", concluye el investigador.