ELCHE. La empresa ilicitana Bioarray ha incorporado a sus servicios una innovadora línea de análisis para la realización de test fiables en la detección del SARS-CoV2, con la que dará servicio a entidades públicas y privadas. Las pruebas están destinadas a particulares y a trabajadores de empresas en general, pero muy especialmente están indicados para aquellos que desarrollen su trabajo en contacto con el público y para los que se reincorporan presencialmente a sus puestos de trabajo. Para acceder a los test es imprescindible que presenten una prescripción médica.
De esta manera la compañía biotecnológica va a contribuir a incrementar la vigilancia y control en la fase de transición de la pandemia de coronavirus, así como a mejorar los indicadores de seguimiento de la misma.
Bioarray ha incorporado dos tipos de test:
1.- Test rápidos de anticuerpos. Es recomendable pasados unos días tras la infección y los resultados indican si el paciente se ha inmunizado
2.- Test RT-qPCR. Detectan el virus de manera más temprana y mientras esté activo en el organismo. No aportan información sobre si el paciente puede transmitir la enfermedad a otras personas
Para facilitar la atención a los usuarios ha instalado un punto de toma de muestras en el aparcamiento de la Universidad Miguel Hernandez, frente al Edificio Quorum III, donde el personal de toma de muestras equipado con las correspondientes medidas de protección atiende a los pacientes.
Bioarray ha incorporado a su laboratorio un robot Opentrons, la última tecnología en la realización de pruebas diagnósticas, una máquina que permite el procesamiento de cientos de muestras diariamente de forma rápida, eficaz y fiable.
Dada la situación actual, Bioarray está utilizando todos sus recursos para la detección del COVID-19. La utilización de un robot para el procesado de muestras permite la automatización de procesos clave, haciéndolos más rápidos y seguros para los científicos.
Gracias a esta tecnología de vanguardia la empresa es capaz de procesar de forma rápida, fiable y eficiente más de 2.000 pruebas semanales para COVID-19 por RT-qPCR.
Bioarray, con sede en el Parque Científico de la Universidad Miguel Hernández de Elche, es un centro biotecnológico de referencia, desde su fundación hace doce años, en el uso de tecnologías masivas para diagnóstico genético, con servicios de alta calidad e innovadores, orientados al desarrollo de la medicina personalizada, para identificar patologías de forma rápida y eficiente.
El rápido crecimiento de esta compañía ha permitido que actualmente el 47% de sus ventas procedan de fuera de España, teniendo operaciones en más de 50 países y entre las que se incluyen dos filiales propias.
Las personas galardonadas son Marina Gomariz (TFG) y Víctor Crespo, Adrián López Murcia y José Alberto Jiménez en TFM.
