BENIDORM. El Ayuntamiento de Benidorm empezará este año a instalar un sistema de control y detección de vertidos no autorizados a la red de alcantarillado. Según explicó el concejal de Ciclo del Agua, José Ramón González de Zárate, de esta forma se monitorizará toda la red de aguas residuales. No obstante, su implementación tardará en llegar hasta mediados de 2022. Asimismo, el regidor señaló que su coste será asumido por la empresa concesionaria, Hidraqua, con cargo al Fondo de Inversión, por ello, indicó que no repercutirá en el recibo de los usuarios.
Tal y como explicó el edil, los vertidos sin control provocan diferentes problemas, empezando por la propia red con el deterioro de los canales e instalaciones. Hay que tener en cuenta que la mayoría de estos actos incumplen la normativa medioambiental en el aspecto de la conductividad porque presentan un exceso de salinidad, según apunta González de Zárate. Todo ello provoca un gasto mayor para las arcas municipales y la de los regantes del Canal Bajo del Algar "porque exige mayores consumos energéticos". Al mismo tiempo, el concejal reseñó que también se obtiene un agua depurada de peor calidad para el riego.
Por todo ello, el mecanismo que integrarán permitirá "localizar los puntos de vertidos contaminantes y a las personas responsables”. De este modo, será posible denunciarles porque están incumpliendo la Ordenanza de Medio Ambiente. Como consecuencia, tendrán que asumir los costes de tratamiento y depuración que corresponda, y quedar liberados de ello tanto el Ayuntamiento como los regantes.
Además de esta función, De Zárate ha incidido en que “esta monitorización y telegestión de la red de residuales está en consonancia con los conceptos de Smart City y Destino Turístico Inteligente (DTI)” y “va a posibilitar tener datos en tiempo real del alcantarillado por zonas o de los volúmenes de pluviales que se registran en los diferentes episodios de lluvia”.
Finalmente, el edil ha recordado que, como ya avanzó el alcalde Toni Pérez el pasado 23 de diciembre, también en un plazo de dos años la totalidad de los hogares y establecimientos de Benidorm contará con “contadores inteligentes”, que permitirán al usuario conocer y controlar su consumo en tiempo real y detectar posibles fugas o averías. La implantación de estos contadores de telelectura tampoco se repercutirá en el recibo.
