EL CAMPELLO. La base de la grúa municipal de El Campello se transformó en un local de fiestas durante la celebración de los Moros y Cristianos 2022, que tuvieron lugar del 12 al 15 de octubre. Una situación que sale ahora a la luz con el escrito registrado por Esquerra Unida pidiendo que se abra un expediente de sanción a Campello Motor S.L., la empresa adjudicataria del servicio de la grúa. En el documento presentado, EU manifiesta desconocer si el gestor o un órgano municipal competente sabían de estas actividades festivas.
El portavoz del grupo municipal de izquierdas, Pedro Mario Pardo, ha garantizado en el escrito que, durante esos días, el local estuvo ocupado por personas bebiendo, con barras habilitadas, música en un volumen alto e incluso ruido de material pirotécnico. Todo ello se puede comprobar tanto en el vídeo del siguiente enlace como en el vídeo que se adjunta a continuación:
En el apartado de penalizaciones del pliego de la grúa señala como infracción grave "el incumplimiento de la obligación de mantener y conservar los bienes adscritos al servicio", mientras que califica como muy graves "ceder, subarrendar o traspasar la totalidad o parte de los servicios objeto de la concesión, bajo cualquier modalidad o título, sin autorización expresa del Ayuntamiento" y la "dedicación del servicio a usos diferentes a los mencionados en la concesión sin previa autorización municipal".
En el pleno del mes de febrero, el portavoz de EU preguntó sobre el tema al concejal responsable de Seguridad, Rafael Galvañ (PP), que comunicó no saber de qué se trataba y prometió enterarse para responder al edil de izquierdas. "Para estas cosas privatiza servicios públicos el Partido Popular", ha afeado Pardo, quien ha declarado que, "desde que en mayo se pusiera en funcionamiento el servicio privatizado de arrastre de grúa, el incumplimiento de las distintas normativas se ha convertido en el modo de proceder de esta empresa, con la complicidad de un gobierno local que no ha visto nada hasta que EU no lo ha denunciado".
Pardo asegura que, "en tan solo nueves meses que lleva el contrato en vigor, la empresa ha utilizando de manera fraudulenta el vado concedido como reserva de aparcamiento sin que, hasta la fecha, nos conste que se le haya sancionado, tal y como establece la ordenanza de vado". Con esto se refiere a que la empresa solicitó autorización municipal para instalar un vado, pero tras las investigaciones realizadas por el Ayuntamiento se ha comprobado que las placas no se han ubicado en la puerta de garaje solicitada, sino en la puerta colindante, para la cual, si se hubiera pedido el informe previo habría sido no favorable, ya que delante de ella hay un árbol que impide la entrada de vehículos y en la persiana del local hay un cerramiento de aluminio y cristal sin acceso para vehículos.
En una segunda inspección se comprobó que la placa se había recolocado para abarcar las dos persianas. Es decir, el hueco de la puerta de acceso al garaje mide 2,42 metros, mientras que las placas ocupan una longitud de 6,54 metros. Además de colocar el vado en una ubicación no permitida, la empresa adjudicataria del servicio de la grúa pintó en amarillo 5,94 metros de bordillo, cuando su solicitud era de unos tres metros, "restando ilegalmente una plaza de aparcamiento a los vecinos y vecinas de la zona", ha interpretado el portavoz de EU, que exige "el máximo rigor y pulcritud en el cumplimiento de la Ley. Por lo que esperamos que desde el Ayuntamiento se dé una respuesta contundente y acorde a la gravedad de los hechos denunciados".
Fuentes informan a Alicante Plaza de que el concesionario del servicio ya ha solventado la situación, haciendo caso a los requerimientos que se establecen en el informe municipal. Estos son señalizar correctamente el vado concedido y, en consecuencia, el espacio no destinado a la entrada y salida de vehículos. Esto significa que la mercantil ha vuelto a pintar de gris el exceso de bordillo y ha colocado la placa abarcando la longitud que le correspondía.
