El alcalde de Alicante, Luis Barcala, y la portavoz municipal de Vox, Carmen Robledillo, tras anunciar el pacto por la aprobación de los presupuestos de 2024.ALICANTE. El pacto presupuestario alcanzado entre el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante, del Partido Popular (PP) y Vox, el pasado enero se cumplirá sin variaciones. Así lo ha garantizado este miércoles el alcalde, Luis Barcala, tras participar en la apertura del Congreso de Telecomunicaciones desarrollado en el Adda, para concretar que dos de las medidas reivindicadas por los representantes municipales del partido de Santiago Abascal se pondrán en marcha antes de que finalice este año. Se trata, en concreto, de la oficina de ayuda a la maternidad -que los grupos del eje progresista que ejercen funciones de oposición han interpretado como una oficina antiaborto- y de otra oficina de lucha contra la ocupación ilegal de viviendas.
Cerca de una semana después de que los representantes de Vox asegurasen que la primera reunión de la comisión de seguimiento de ese acuerdo político -por el que se sustanció su voto a favor de las cuentas de 2024- había deparado un balance "agridulce" por el retraso en el cumplimiento de algunos de los compromisos adquiridos, el primer edil ha apuntado que esas dos peticiones concretas quedarán satisfechas sin ningún género de duda. En esta línea, ha explicado que las últimas decisiones adoptadas por el Gobierno central como la recuperación de la regla de gasto, que conlleva que los remanentes municipales (ahorros presupuestarios del ejercicio precedente) solo puedan destinarse a cubrir deuda, ha generado retraso en el cumplimiento de los acuerdos alcanzados.
"Nos afecta a nosotros y a todos los municipios", ha sostenido, "y hay cuestiones que son un poco sobrevenidas que pueden alterar la hoja de ruta en cuanto a los tiempos pero no en cuanto a la voluntad" de materializar esos compromisos. Así, ha asegurado que las dos oficinas "se pondrán en funcionamiento antes de final de año con toda certeza".
En este sentido, ha incidido en que las últimas decisiones adoptadas por el Gobierno va a obligar al ayuntamiento a realizar "varios ajustes" en los presupuestos municipales, "que elaboramos antes de que se tomasen esos acuerdos y que nos condicionan". Esos ajustes se traducirán en modificaciones de crédito para poder disponer de los recursos generados como ahorros en licitaciones públicas o en el área de recursos humanos, con la previsión de que el primero de esos cambios presupuestarios pueda acometerse en el mes de mayo.
