ELCHE. El Ayuntamiento ha dado luz verde esta mañana a la reurbanización del entorno donde se situaba el antiguo hotel de Arenales, una vez derribado e iniciada la regeneración dunar por parte de la Dirección General de Costas en el espacio dejado por el edificio. El portavoz del Gobierno Municipal, Héctor Díez, ha afirmado que se intervendrá en el tramo correspondiente del paseo marítimo de la avenida San Bartolomé de Tirajana, la calle Maroma y la prolongación de la calle La Coruña.
“Esto supondrá ganar unos cien metros lineales de paseo marítimo nuevos con un ancho de cinco metros, que actualmente están vallado por la regeneración dunar, pero que permitirá alinear totalmente el paseo con las manzanas norte y sur, hasta ahora limitadas por el muro del antiguo hotel y por el cercado provisional de Costas”, ha explicado Díez. En concreto, en el paseo se dará un aspecto de transición a la duna regenerada con un acabado diferenciado en hormigón y madera; en la calle Maroma, más al sur, se mantendrá la calzada y acera al ser el acceso único a una urbanización en primera línea y de los vehículos de emergencias a la playa. Al norte, la prolongación de la calle La Coruña desaparecerá y se convertirá en una pasarela de madera con la que se podrá acceder a la playa desde el mismo paseo.
“Con ello concluye la reurbanización de todo el entorno y se dan por acabadas las actuaciones de regeneración del entorno del antiguo hotel, ganando así la pedanía un gran espacio dunar, el tener totalmente alineado el paseo de la avenida San Bartolomé de Tirajana y revitalizar el área y toda la línea de costa de Elche”, ha manifestado el edil.
Estos trabajos los asumirá completamente la Dirección General de Costas, que finalizó recientemente el derribo del inmueble. Una vez se produjo la retirada de la estructura y vaciado del sotano del mismo, Costas ha estado trabajando en la regeneración dunar del espacio de 6.000 metros cuadrados dejado por el viejo hotel, trasladando arena desde la playa de El Altet e instalando un vallado provisional que pretende proteger la duna mientras que el paso del tiempo y la erosión hace que vaya cogiendo forma con la arena aportada para poder reconstruirla.