ALICANTE. La Asociación de Empresarios de la Vega Baja (ASEMVEGA) considera "inadmisibles los movimientos que está realizando el Gobierno de la Nación para recortar, de forma injustificada, las transferencias del Trasvase Tajo-Segura, lo que en la práctica supondrá una disminución de la capacidad productiva de la Vega Baja, un territorio que padece un déficit estructural de agua y que gracias a esta transferencia se ha transformado en un espacio generador de riqueza y empleo".
Los empresarios de todos los sectores del Bajo Segura, señala la asociación en un comunido, "estamos convencidos de que las nuevas reglas que se quieren aplicar a esta transferencia hídrica, vital para esta comarca, reducen considerablemente los umbrales máximos trasvasables y ponen en peligro el abastecimiento para regar, pero también para el consumo humano. A esto se suma que el próximo Plan de Cuenca del Tajo tiene previsto aumentar los caudales ecológicos, lo que también redundará en una menor aportación de agua a la cuenca del Segura y perjudicará muy especialmente a la provincia de Alicante, territorio en el que el 61,65% de la superficie agrícola de regadío dependen del Acueducto Tajo- Segura".
Estas medidas de "recorte arbitrario son un ataque injustificado a los intereses de todo el territorio que se beneficia del trasvase, pero especialmente a la Vega Baja, que sufrirá las consecuencias de esta merma en forma de pérdida de potencial económico y de empleo en el sector agrario, punta de lanza de las exportaciones de la provincia de Alicante. Los recortes en la transferencia del Tajo al Segura también tendrán consecuencias en otros sectores como el turismo, el transporte, así como efectos medioambientales y paisajísticos" concluye el escrito.