PAMPLONA (EFE). El entrenador de Osasuna, Jagoba Arrasate, no ha dado pistas sobre el once que podría alinear ante el Elche en una cita en la que el técnico de Berriatua buscará que sus jugadores salgan enchufados, sin atender la clasificación para evitar posibles relajaciones.
Con la permanencia ya lograda, Osasuna debe buscar alicientes en estas cinco últimas jornadas para no verse sin tensión competitiva. El reto de meterse en Europa parece complicado, ya que Athletic Club y Villarreal deberían pinchar y los rojillos no dejarse demasiados puntos por el camino.
Arrasate ha dirigido una sesión en la que ha tenido lugar el habitual partido entre los integrantes de su plantilla. Como es normal, el entrenador ha entremezclado a los más habituales con aquellos que cuentan con menos minutos.
Aridane y David García han ocupado el eje de la zaga con Chimy Ávila y Budimir en la punta de ataque. En frente, Lucas Torró, Oier y Javi Martínez han sido los encargados de manejar el centro del campo.
Será el sábado cuando Arrasate lleve a cabo las pruebas definitivas a puerta cerrada con el Elche en mente. La permanencia de los ilicitanos no es matemática, por lo que los hombres de Francisco no especularán e irán a por los navarros sin piedad.