ALICANTE. La seguridad y la innovación son dos elementos clave en el trabajo por la vuelta a la normalidad en las playas. Si bien aún quedan semanas -en el mejor de los casos- para que se permita de nuevo la asistencia a los arenales y los baños en el mar, muchas administraciones y firmas trabajan ya en aplicaciones y métodos donde la tecnología ayudará a controlar el aforo en estos espacios. Desde varios ayuntamientos ya han mostrado sus propuestas para que, si la evolución del coronavirus continúa en descenso y las fases previstas del desconfinamiento lo aceptan, controlar la asistencia a los litorales y permitir el disfrute de estos enclaves en verano.
Desde el Ayuntamiento de Oliva han diseñado una campaña de comunicación: "Disfruta de Oliva, ¡Seguro!" que busca una vuelta a la normalidad progresiva de la ciudad, en la que el turismo es uno de sus factores clave. Entre otras medidas orientadas al comercio y, tanto a personas locales como visitantes del municipio, ofrecerán datos, a través de una plataforma online, donde aparecerá el aforo actualizado de las playas varias veces al día, así como las medidas adoptadas y las recomendaciones que han de tener en cuenta en el regreso al litoral.
Esta iniciativa es un trabajo en conjunto de Oliva Turismo y la agencia de servicios creativos, especializada en comunicación corporativa, Coma Creativa (Gandía). Ahora trabajan para poner en marcha esta aplicación, una vez se conozca toda la normativa aplicable para la apertura de las playas y a la hostelería, incluidos los chiringuitos. Cuando la normativa lo permita, desde la aplicación aportará información sobre medidas de higiene adecuadas, la distancia social recomendada o seguir las normas para disfrutar de las distintas actividades al aire libre.
El municipio de Fuengirola usará Inteligencia Artificial para rastrear cuántas personas hay en sus playas una vez que se levanten las restricciones de coronavirus. Un programa informático desarrollado por una empresa local controlará la capacidad de las playas con el objetivo de evitar el hacinamiento y minimizar el riesgo de infecciones por Covid-19. La aplicación informática, será la primera de este tipo en España y ha sido desarrollada por la empresa malagueña Juma Tecnología & Smartcity.
La herramienta informática, diseñada para garantizar la seguridad y el cumplimiento de las medidas básicas de prevención, se lanzará para coincidir con la reapertura de las playas cuando las autoridades sanitarias competentes lo permitan. El software que utiliza funciona a través de sensores de inteligencia artificial que se instalarán en postes de luz. De este modo, se utilizarán entre 40 y 50 sensores para cubrir las siete playas principales de Fuengirola.
Con este método se medirá el número de personas que entran y salen de las playas y la información se transformará en redes virtuales que alertarán cuando se haya alcanzado la capacidad máxima, de acuerdo con las medidas de distanciamiento social. La información estará disponible al público a través de una aplicación móvil gratuita.
La ocupación de las playas estará representada en colores: el verde indicará disponibilidad en el arenal; el color amarillo significará que se ha alcanzado el 75% de la capacidad, mientras que el rojo alertará de que se ha alcanzado el límite aceptado. Además, este sistema se puede aplicar a cualquier espacio público: desde centros comerciales hasta hoteles o lugares donde se llevan a cabo eventos públicos.
La firma Juma Tecnología & Smartcity ya ha desarrollado otras iniciativas para la lucha contra el coronavirus y es una empresa que funciona desde 1990 y que ha evolucionado hasta que, en estos momentos realiza soluciones de seguridad móvil; de municipio videoprotegido; de gestión de tráfico; de Smart City; de tecnología para el ocio y para la industria 4.0 e infraestructuras.
En el municipio gallego de Sanxenxo la solución que se propone consiste en dividir una de sus playas, la de Silgar, en cinco sectores que contarán con personal para facilitar a los usuarios su ubicación.
Cada sector tendrá un color diferente y estará formado por cientos de cuadrículas de 3x3 metros, que en función del número de personas se podrán ampliar. Las cuadrículas estarán formadas por estacas de madera clavadas en la arena y unidas por unas cuerdas que se podrán recolocar con facilidad en función del número de personas. La nueva ordenación de la playa reserva franjas para albergar usos y servicios.
Otro municipio turístico, Lloret de Mar, en Girona prevé separar a personas mayores, familias y adultos en sus playas como forma de control de aforo y seguridad. El plan formulado adapta los protocolos de seguridad y sanidad en todo el municipio, pasando por su litoral y prevé cuatro etapas.
Además, la empresa D1N1, especializada en el control de aforo y accesos en grandes recintos de música y festivales, ahora ofrece la posibilidad de emplear su tecnología para el control del acceso a las playas y otros lugares públicos en el desconfinamiento. Desde la firma aseguran que cuentan con un sistema de ata tecnología con una cámara 3D que puede realizar mapeos sobre una línea virtual capaz de diferenciar una silueta humana.
Este sistema ha sido utilizado en conciertos, festivales y eventos deportivos y a partir de ahora podría ser una alternativa en lugares como la costa. Para que sea efectivo, abundan, debe haber un punto de acceso controlado y, a partir de ahí, instalar el sistema.