SANT JOAN D'ALACANT. El cementerio municipal de Sant Joan ha recuperado, saneado y acondicionado su parte más antigua, donde varios nichos construidos a principios del siglo XX y con más de 100 años de antigüedad, presentaban un estado ruinoso y amenazaban un derrumbe que se ha podido evitar. La Concejalía de Cementerio, dirigida por el edil José Luis Olcina, ha invertido más de 65.000 euros en las obras de demolición, relleno y rehabilitación de nichos situados en la parte más alta del camposanto, donde las filtraciones y desprendimientos puntuales obligaron a impedir el acceso de los usuarios durante un tiempo, hasta que ya se ha podido recuperar el tránsito habitual a toda persona que quiera visitar el lugar donde están enterrados sus seres queridos.
En concreto, las zonas afectadas del cementerio comprenden las calles Virgen del Carmen, Virgen de los Dolores y Santísimo Cristo, las tres situadas junto a los muros exteriores del camposanto, por lo que siempre han estado muy expuestas a las escorrentías de agua y a la erosión natural generada por el paso del tiempo en la ladera que llega hasta la ermita del Calvario. En algunos casos, había desaparecido la losa del techo, lo que supone que las fosas y panteones quedaban totalmente expuesto al agua de lluvia o se habían deshecho lápidas construidas poco después del año 1900.