MADRID. A partir del próximo lunes, la ITV será "más independiente, exigente y completa" que la que había hasta ahora, según la Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos (AECA-ITV).

Para los conductores, una de las claves de la nueva ITV del 20 de mayo será el uso de herramientas de lectura del sistema de diagnóstico a bordo (OBD).

OBD y la nueva ITV

Este sistema se encargará de controlar si la centralita del motor del vehículo "tiene registrado algún defecto o algún mal funcionamiento en su sistema de gestión de las emisiones", ha explicado en una entrevista a Efe el director de Operaciones de ITV de TÜV SÜD ATISAE, Raúl Sanguino.

Al mismo tiempo, Sanguino ha querido "lanzar un mensaje de tranquilidad a la gente", ya que, con esta nueva prueba, "si el vehículo está en las condiciones de mantenimiento adecuadas", no tiene porqué haber más índice de rechazo en las inspecciones del que hay ahora mismo (según sus datos, éste alcanza el 18 % y el motivo más común es algún problema en los dispositivos de alumbrado y señalización).

El sistema OBD va "dirigido a detectar fraudes" o modificaciones en los sistemas de gestión para modificar las prestaciones del vehículo de manera consciente y "a expensas de las emisiones contaminantes", por lo que la gente "no tiene que tener ningún miedo" a este nuevo procedimiento, ha subrayado.

El OBD se empezará a utilizar primero en fases de pruebas y a partir del 10 de septiembre se chequeará el sistema de control de emisiones de los vehículos Euro 5 y Euro 6 (los vehículos más antiguos no disponen de dispositivo OBD) y será "un criterio como cualquier otro punto de la inspección", ha apuntado.

Esta prueba se realizará de forma complementaria al test de emisiones reales del tubo de escape, para la que "no se introducen nuevos límites de emisiones ni se controlarán nuevos gases nocivos", ha puntualizado la patronal AECA-ITV.