ORIHUELA. La Plataforma de Afectados por la Desaparición del IES El Palmeral ha vuelto a cargar contra el Ayuntamiento de Orihuela y la Conselleria de Educación por la gestión del proceso de transformación del antiguo instituto en el actual Centro Integrado Público de Formación Profesional (CIPFP) El Palmeral. El colectivo lamenta que el cambio se haya llevado a cabo “sin planificación, sin recursos y sin respeto hacia la comunidad educativa”, una situación que, según denuncian, se ha traducido en episodios de desorden y tensión vividos durante la última semana en el centro.
La Plataforma sostiene que desde el inicio la operación ha estado marcada por la improvisación y la falta de diálogo. La decisión de suprimir el instituto, aún en funcionamiento, para convertirlo en un CIPFP —explica— se tomó sin contar con el profesorado, el alumnado ni las familias, y sin evaluar el impacto sobre el resto de la red educativa local. Un año después, añaden, las consecuencias son visibles: aulas sin equipar, falta de profesorado, desorganización y un incremento notable de las ratios en los otros institutos públicos de Orihuela.
Según el comunicado, la Conselleria no habría cumplido con la inversión anunciada para dotar al nuevo centro de los medios necesarios, lo que ha convertido lo que se presentó como “centro de referencia comarcal” en un ejemplo de “abandono institucional y propaganda vacía”. En paralelo, acusan al Ayuntamiento de haber guardado silencio y de limitarse a reproducir “mensajes complacientes” sin exigir soluciones ni medidas correctoras.
El arranque de curso ya anticipó estos problemas, según señalan. Hubo incidencias en los procesos de matriculación, falta de personal administrativo, problemas en la planificación horaria y deficiencias en la adecuación de espacios. La dirección del centro fue nombrada a última hora y la plantilla continúa incompleta. Todo ello ha obligado a trasladar alumnado a otros institutos ya saturados y ha generado, en palabras de la Plataforma, “una masificación insostenible” en el sistema educativo local.
Además, el colectivo vincula el desorden organizativo con situaciones de riesgo vividas recientemente dentro del centro e insiste en que deben garantizarse las condiciones de seguridad y bienestar, especialmente para el alumnado más joven.
Ante este escenario, la Plataforma reclama seis medidas urgentes: dotación inmediata de recursos materiales, refuerzo de profesorado y personal administrativo, planificación real con inversión efectiva, transparencia en la toma de decisiones, participación de la comunidad educativa y el fin del uso político de la educación. “Orihuela no necesita más titulares ni fotos: necesita soluciones reales”, concluyen.