ALICANTE. Las molestias generadas por el cierre de la estación del tranvía en Luceros, y por la suspensión del servicio de la Línea 3 entre Alicante y El Campello, en pleno verano podrían prolongarse probablemente hasta finales de esta semana, según precisaron este miércoles portavoces oficiales de Ferrocarrils de la Generalitat (FGV). Según las mismas fuentes, los trabajos de reparación de la estructura del ascensor, formada por paredes de vidrio de gran tamaño y más de 300 kilogramos de peso, son más complejos de lo esperado, por lo que todo apunta a que podría ser necesario que se desarrollasen a lo largo de varios días.

Hasta entonces, la operativa continuará organizándose según el anuncio formulado por FGV: la parada de origen y término en el centro de Alicante seguirá siendo temporalmente la estación de Mercado. Los usuarios que habitualmente utilicen la Línea 3 para desplazarse entre Alicante y El Campello tendrán que recurrir a los autobuses de la línea 21 del servicio de autobús urbano, que conecta Alicante con la Playa de San Juan y El Campello y que verá reforzado su servicio. El resto de las líneas 1, 2 y 4 seguirán circulando con normalidad hasta la estación de Mercado.

El cierre de la estación de Luceros se acordó después de que, en la noche del martes, se detectase el riesgo de caída de parte de la estructura del cajón del ascensor de Luceros, lo que, además de afectar al trazado de las vías, podría poner en peligro la seguridad de los usuarios en los andenes. Además, se acordó suspender el servicio de la L-3, ya que, según fuentes de FGV, la estación de Mercado no está diseñada para compatibilizar las necesidades de la operativa de 4 líneas.

FGV procederá a reabrir la terminal de Luceros en cuanto quede reparada la estructura del ascensor. No obstante, la puesta en funcionamiento del ascensor se demorará durante un plazo adicional, ya que, según las mismas fuentes, debe producirse la recepción de uno nuevo.