ALICANTE. Ya es oficial: Alicante adapta el horario de funcionamiento de las terrazas de la hostelería con un adelanto respecto a la regulación actual, aprobada en 2014, tanto en la temporada de invierno como en la de verano con el fin de conciliar la actividad económica del sector con el descanso de los residentes. Ese recorte en la autorización de funcionamiento para los veladores ha quedado confirmado en el transcurso del pleno ordinario de noviembre, este jueves, con los votos del equipo de gobierno, del Partido Popular (PP), y de Compromís: las dos formaciones que ya aprobaron la aprobación inicial de la nueva Ordenanza de Ocupación de Vía Pública el pasado mes de julio. Los ediles del PSOE se han abstenido, mientras que Vox y Esquerra Unida Podem han votado en contra, con lo que se han mantenido las posiciones fijadas en comisión informativa.

Eso sí, la regulación queda expuesta ahora al previsible recurso contencioso-administrativo que ya sopesan las principales asociaciones empresariales de la hostelería: la Asociación Provincial de Empresarios de la Hostelería (APEHA), la Asociación de Restaurantes de Alicante (ARA) y la Asociación de Locales de Ocio y Restauración (Alroa). En principio, esa impugnación se dirigiría frente a los artículos del texto en los que se determina el nuevo régimen horario con el argumento de que no se habría incorporado ninguna memoria económica ni ningún estudio de impacto sobre las consecuencias de esa modificación, según precisaron fuentes consultadas. 

En esta línea, las asociaciones del sector persisten en su rechazo a la nueva regulación, después de que el equipo de gobierno haya desistido de incorporar a la normativa todas sus alegaciones (incluida la posibilidad de que se alargase el horario especial de verano hasta el 15 de octubre). Y recalcan las contradicciones que, a su juicio, suponen el hecho de que Alicante -considerada ciudad turística, con una climatología suave durante cerca de nueve meses- vaya a pasar a disponer de un horario de funcionamiento de las terrazas más reducido que otras poblaciones no turísticas del interior peninsular -sujetas a temperaturas inferiores-, como Tarazona, como ya informó este diario.