CAÑADA. El rey Herodes el Grande y su esposa, Raquel, discuten. Esta le reprocha haber matado a su hijo, al mandar decapitar a los niños menores de seis años ante el anuncio de la venida del Mesías. Entre esos niños, el daño colateral de su propio hijo. Esta es la última escena del Auto Sacramental de Reyes, uno de los más antiguos de España y que se representa en el municipio alicantino de Cañada llegada la fecha de los Reyes Magos. Una trama ya sabida, pero que en esta historia no duele tanto como un spoiler de la serie de moda, por todo lo que rodea a esta representación.
Aunque Cañada lleva desde mediados del siglo XVIII realizando esta representación, se han ido incluyendo ciertas novedades a lo largo de los años, según cuenta a Alicante Plaza el presidente del Patronato del Auto Reyes Magos, Moisés Barceló, mientras ultima preparativos. Entre estas transformaciones, destacan nuevas escenas o nuevos medios técnicos: "Antes, los escenarios se montaban el mismo día; ahora los montamos tres meses antes" debido a la complejidad.
Y es que el escenario principal, el palacio de Herodes, se extiende 400 metros cuadrados, pesa 4.000 kilos y cuenta con una tramoya giratoria que permite mostrar dos escenarios. Anexa a él hay una pasarela y una cueva de base fija que se decora con paneles de fibra de vidrio simulando un poblado hebreo. "Además, hay escenografías móviles en enclaves naturales que hay que poner a punto. Por ejemplo, tenemos construido un río que todos los años ponemos a punto con bombas para depurar el agua", cuenta el presidente del Patronato.