ALICANTE. Parada de la gira de Niños Mutantes en la Sala Stereo de Alicante, con motivo de la presentación de su nuevo disco, Diez. Es curioso porque la parada se produce, en parte, gracias a la gira Sona la Dipu, de la Diputación de València, que trae consigo al ganador del concurso de maqueta, Durga.

Conforme se atraviesa el umbral de la Stereo de Alicante se percibe la sensación de callejear por el túnel del tiempo, hasta llegar a aquellas míticas salas de los años 70s y 80s donde las subculturas urbanas campaban a sus anchas, desde la psicodelia hasta la música electrónica convirtiéndo "lo underground" en una forma de respirar y buscar salidas.

Diez ha servido a Niños Mutantes como una nueva forma de respirar y explorar nuevos territorios, tras presentar hace menos de un año como el propio nombre indica su décimo álbum, grabado ven los estudios de Martin Glover en Albuñuelas (Granada) con Abraham Boba y César Verdú (León Benavente) encargados de la producción y terminado en los estudios Reno de Madrid.

Superada la crisis existencial, reflejan en su nuevo trabajo músculo y rabia en los temas que estrenan, como en Menú del día, NM, No continua, Jovencita, Salmo o Pura vida para intercalar con los grandes hits de la banda Las noches de insomnio, Hermana mía o No puedo más contigo, No continuar, Veneno polen, Todo va a cambiar o Errante, que supone el momento álgido de la noche y, por tanto, el recuentro con los pasajes históricos del grupo

La experiencia de 20 años de trayectoria se ve reflejada sobre el vetusto escenario de la Stereo dejando fe del lado más maduro y genuino de la banda; no faltaron los homenajes al público, que ha estado siempre al lado de ellos, como suele recordar el vocalista Juan Alberto, y el reconocimiento a todo el equipo que les acompaña durante toda la gira, y que es el responsable de su bueno sonido en directo, que tendrá su próxima parada el próximo sábado en la sala La Trinchera de Málaga.