ALTEA. El Partido Popular de Altea ha denunciado "la pasividad del gobierno local ante el inminente cierre del Centro Residencial Noruego, que cesará su actividad el próximo 31 de junio". Este centro, gestionado por el municipio de Bærum (Noruega), ofrecía servicios de rehabilitación y empleaba a más de 20 alteanos.

Así lo ha informado el grupo municipal del PP en un comunicado este lunes. "Según ha trascendido, la bajada de usuarios debido a los altos costes de mantenimiento ha hecho insostenible su continuidad", reza el escrito. Desde el PP lamentan que "el Ayuntamiento no ha movido un dedo ni para salvar el servicio ni para apoyar a los trabajadores afectados".

Además, aseguran que "el interés de posibles compradores con proyectos para mantener la actividad, como hoteles, albergues juveniles o incluso otra residencia, se ha evaporado tras realizar consultas con el Ayuntamiento, lo que refuerza la idea de una gestión ineficaz y poco transparente".

Desde el PP se propone "una solución realista: que el Ayuntamiento adquiera el inmueble y lo convierta en un centro de día para mayores, una necesidad urgente en el municipio. Esta opción público-privada ya fue planteada desde la Generalitat como alternativa a la pérdida del centro comarcal prometido en el Minibotànic, un proyecto que también se frustró por la inacción del equipo de gobierno local de Compromis y PSOE", afirman en el comunicado.

“Compromís y PSOE dejan perder otro servicio esencial mientras se niegan a actuar. Desde el PP queremos soluciones, no excusas. Exigimos al alcalde Diego Zaragozí que deje de aparentar y empiece a gobernar con responsabilidad por el bien de nuestros mayores y del empleo en Altea”, concluye Silvia Pérez, edil popular.

Pisos turísticos

Este lunes el PP también se refería a la moción a pleno que lleva el gobierno local sobre la regulación de las viviendas de uso turístico. La portavoz del Grupo Municipal, Rocío Gómez, denunciaba la "improvisación y falta de transparencia" en esta materia. Así, acusaban al bipartito de crear una "farsa" en torno al proceso de participación: "Ni se han recogido propuestas clave realizadas en comisiones, ni se ha valorado la diferencia entre quienes han cuidado y rehabilitado sus viviendas y quienes las han abandonado en el Casco antiguo". Asimismo, informó que la propuesta a pleno contempla una nueva suspensión de licencias durante un año en "gran parte del municipio". 

Ante esta nueva denuncia de los populares, el concejal de Urbanismo, José Orozco, aseguró que el grupo de la oposición buscaba "confundir a la opinión publica". El edil remarcó que el Ayuntamiento estaba siendo "pionero" con la suspensión de la emisión de los certificados de compatibilidad urbanística en enero de 2024. Además, insistió en que sí que se realizó un proceso de participación pública "muy ambicioso" con siete talleres y una encuesta donde participaron más de 500 interesados. 

Sobre la nueva suspensión de licencias, el regidor aclaró que se trata de las zonas en las que la ordenanza contempla restricciones. "Para nada vamos al punto de partida como quiere confundir el PP", manifestó.