BENIDORM. El Ayuntamiento de Benidorm ha adjudicado a la empresa Elecnor Servicios y Proyectos SLU los trabajos de la segunda fase de la renovación de la catenaria lumínica del Paseo de Levante. Así lo ha acordado la Junta de Gobierno Local este lunes, para lo cual, la empresa contará con ocho meses de plazo para su finalización por un importe de 854.885,07 euros.

Tal y como ha venido contando este diario, al procedimiento de licitación se presentó otra empresa, Sociedad Ibérica de Construcciones Eléctricas SA (Sice), conocida en la ciudad por otros trabajos recientes, incluida la primera fase de este proyecto. La puntuación final ha sido de 95 puntos frente a los 82,69 de la segunda.

La actuación partía de un presupuesto de licitación de 1.099.383,35 euros y está incluida en el Plan de Sostenibilidad Turística en Destino ‘Benidorm Visión 360’, que se incluye a su vez en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado con fondos de la Unión Europea-Next GenerationEU.

El objetivo, según ha afirmado el alcalde, Toni Pérez, es que “esta segunda fase de la catenaria sea una realidad muy pronto”, así, la previsión es que esté finalizado "en los primeros compases de 2026". Para su ejecución, el Consistorio obtuvo en noviembre del 2024 la autorización del Servicio Provincial de Costas de Alicante, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Hay que tener en cuenta que afecta al paseo marítimo, en concreto, desde el tramo comprendido entre la avenida de Europa –donde finalizó la primera fase- y la calle Metge Miguel Martorell.

“Cumplimos una vez más con los compromisos de este equipo de gobierno con nuestra ciudad y nuestros ciudadanos, ante la omisión de responsabilidades por parte del Estado, que es quien, por competencias, debería ejecutar la obra” ha dicho el primer edil. Así, el popular ha reiterado las reivindicaciones del gobierno local para que ejecute estas obras al completo el Estado central. El primer edil ha recordado que las instalaciones de alumbrado público y la catenaria existente del Paseo de Levante “fueron realizadas en la década de los años 90 del siglo pasado, en el ámbito de las obras de construcción del Paseo Marítimo de la Playa de Levante, a través de una licitación instrumentada en su día por el Ministerio de Obras Públicas, Transporte y Medio Ambiente”.

El alcalde, por último, ha lamentado que, “como ya ha ocurrido con muchas otras infraestructuras, como la propia primera fase, los accesos al sector terciario o la denominada segunda fase del Paseo de Poniente, esta obra le correspondería financiarla y ejecutarla al Estado, pero lo que nos hemos encontrado es una nueva omisión de su responsabilidad, en el que probablemente sea el único municipio con paseo marítimo de España donde el Ministerio no cumple con su competencia y su responsabilidad”.

Más eficieciencia energética

Tres décadas después, “y ante la necesidad de renovar toda la infraestructura tanto por el paso del tiempo como para adaptarla a tecnologías más modernas y con mayor eficiencia energética”, ha recordado Toni Pérez, el Consistorio ejecutó las obras del proyecto de la primera fase, en el tramo desde la plaza del Torrejó hasta la avenida de Europa, con una inversión de 1.972.119,41 euros financiados en su totalidad con recursos municipales y con los que se ha obtenido una reducción de la potencia energética superior al 33,65%. “Y no solo hemos logrado ser más eficientes y reducir de manera notable las emisiones de CO2, sino que además este proyecto ha granjeado para nuestra ciudad premios y reconocimientos por su sostenibilidad, como el que recogimos en Madrid de manos de la plataforma EnerTic”, ha agregado Pérez.

Con esta actuación, las luminarias serán sustituidas por lámparas tipo led. Además, contempla la mejora de las condiciones de integración con el ambiente marino en el que se ubica. Para ello, trasladarán al paseo marítimo los cuadros eléctricos que hasta ahora están situados en el propio arenal. Se hará lo mismo con los postes, para desocupar en la medida de lo posible el demanio natural de estos elementos. Con ello también se conseguirá una mejor protección de las instalaciones eléctricas y la mejora de la funcionalidad y de la eficiencia energética.