ALICANTE. La transformación conceptual del papel y el delicado virtuosismo en el manejo del bisturí para tal fin son las singularidades más notorias en la trayectoria artística de Luisa Pastor Mirambell (Alicante, 1977). Su maestría deriva en que este habitual soporte para los discursos deja de ser soporte para ser directamente mensaje, como un todo arrollador que elimina la lógica y construye desde cero una evidencia que, sin embargo, había pasado desapercibida. Así lo hace de nuevo en D-M-D (dinero-mercancía-dinero), un proyecto con el que la alicantina vuelve a la que fue su casa, el Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert, para asumir ese papel con el que denuncia la mercantilización de las especies animales que les está llevando a la extinción.
Por la sede del instituto, en la Casa Bardín, había pasado ya en numerosas ocasiones en las que la artista recibió sus primeros reconocimientos y desarrolló labores de asesoramiento cultural. Por eso es para ella especialmente emotivo este proyecto, seleccionado en la cuarta convocatoria pública Arte en la Casa Bardín, donde además cuenta, como comisaria de la muestra, con Pilar Tébar, presidenta de la Asociación Valenciana de Críticos de Arte. Les une a ambas una larga amistad de más de veinte años y, aunque es la primera vez que este tándem artista/comisaria se fusiona para llevar a cabo una exposición, ahora sí, quedan vinculadas en este proyecto que se podrá ver desde este jueves, 22 de abril, hasta el 4 de junio.