ALCOY. (EFE).- Alcoy se ha vuelto a vestir de gala para vivir la multitudinaria entrada de los dos bandos de la ciudad, los moros por un lado y los cristianos por otro, que después de tres años con los trajes colgados del armario han podido exhibir sus armaduras y el poder real de sus comparsas para recordar la singularidad de la fiesta alicantina.

Unas 14.500 personas entre fiesteros, músicos, bailarines e integrantes de las diferentes comparsas han desfilado este viernes por las principales calles de la ciudad para formar ante un público que ha llenado las 20.000 sillas distribuidas por todo el trayecto para vivir el 'Día las Entradas', en el que se despliegan episodios que se enmarcan en el marco histórico de la lucha entre mahometanos y cristianos en el año 1276.

En la, los cristianos han desfilado con sonidos tribales, criaturas místicas y la destacada presencia del metal en sus vestimentas, con tal de convertirse en el primer ingrediente de la denominada Trilogía de San Jorge, esto es, los tres días de fiesta de la ciudad, en una celebración que comienza este viernes con el día de las Entradas y termina el domingo con el día del Alardo, en el que se detonarán 3.000 kilos de pólvora.

Tras el despliegue cristiano de la mañana, encabezados por su capitán, este año Alfonso Moreno, de la filà (comparsa) Muntanyesos, el alférez del ejército de la Cruz, Joaquín Brotons, de la filà Cruzados, ha sido el encargado de cerrar este desfile y pasar el testigo al bando moro.

Las tropas mahometanas han contado con un ambiente más sosegado, con melodías orientales y con viveza en sus tejidos. En este caso, Rafael Tortosa ha liderado como capitán al bando de la Media Luna, mientras que Rafael Aracil, alférez moro, ha sido el encargado de cerrarlo.

Fuentes municipales han estimado que la participación en estas Entradas de Moros y Cristianos ha llegado a ser de 14.500 personas, que han marchado bajo un cielo de nubes y con la acumulación del confeti en sus cabezas, puesto que es el material que se lanza desde los balcones.

En declaraciones a EFE TV, José Miguel y Ana, de la Filà Ligeros, han asegurado: después de tres años "no sabíamos ni vestirnos", y que tenían "muchas ganas de empezar ya".

Por su parte, Ana, de la Filà Asturianos, ha resaltado que había "muchas ganas de volver a vivir la fiesta, de ver amigos, a la familia", pero, sobre todo, "de disfrutar, porque ya tocaba", en esta fiesta cuya tradición marca en el día 23 de abril el comienzo del patronazgo de San Jorge para la fiesta alcoyana, en honor a los testimonios orales de unos antepasados que narraban la intervención del santo ante el ataque de las tropas musulmanas, encabezadas por el caudillo Muhamad Abu Abdallah Ben Hudzail, más conocido como Al-Azraq.

Las fiestas patronales de Alcoi se extenderán hasta el domingo 24 de abril, que pondrá fin a la Trilogía dedicada a San Jorge Mártir.