ALICANTE. En esta vida siempre creo que nos tiene que pasar de todo. A mí es que me pasa de todo. Por su orden y desordenado. Yo he sido el malo, Cenicienta, la bruja y yo qué se. He sido tú, yo y él. Todos, si vivimos una vida completa, todos seremos el mentiroso, la bruja, el verdugo, el mal amigo, el que pone los cuernos, el odiado por alguien… Todos mentimos y todos tenemos miedos, todos somos todos. A todos nos ha llevado la vorágine a sitios en los que no queríamos estar y de los que luego cuesta mucho salir. Porque la movida de la vorágine no es que nos lleve, pero sí hacer el camino de regreso y vuelves herido y cansado.
Por ahí dicen que el amor es complicado, sea de quién sea y venga de donde venga, pero el amor no es complicado; la gente sí. El amor es simple. Es hacer dos tazas de café por la mañana en vez de una, el avísame cuando llegues a casa y un llámame si lo necesitas para escuchar sin decirte ni una palabra. El amor es un “esta canción me recuerda a ti” y “entiendo como te sientes”. Inventar varias razones para seguir hablando en las noches y hacer porque no se termine la conversación y pedir dos cafés más para seguir ahí, frente a frente.
A unos días de haber iniciado un nuevo año, el mundo ya conoce cuál es el color del 2024, según la guía establecida por el Pantone Matching System, que se estableció como un clásico mundial. Desde hace más de dos décadas, cada año tiene un color asignado, que representa miles de emociones y sentimientos, que se verán reflejados, según las predicciones, en el calendario. Y, aunque muchas personas no consideran que un color esté vinculado a lo que suceda en 2024, es imposible negar que la tonalidad es ideal para combinar con las prendas a utilizar en los próximos 12 meses.
Ya se sabe que color reinará los próximos doce meses. Y no, no es el palpitante rojo que inunda actualmente los armarios tras desbancar al rosa que Barbie instauró el año pasado. El vibrante rojo da paso al que han apodado 'Peach Puff', pelusa de melocotón en español. Una evolución lógica del tono del pasado año, el Viva Magenta, inspirado en el rojo de la cochinilla empleado en los labiales, uno de los tintes naturales más preciados.