ALICANTE. El anuncio lo formuló el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, este lunes, durante su intervención en el debate de Política General: la red de tranvía metropolitano de Alicante crecerá mediante la construcción de una nueva línea para conectar el centro de la capital con el Hospital de Sant Joan. La propuesta no es nueva. Ya se barajó bajo los años de mandato del PP en el Consell, cuando las competencias sobre el desarrollo de infraestructuras recaían en el conseller José Ramón García Antón. Ahora, más de una década después, el anuncio debe convertirse en un proyecto real con una dotación presupuestaria concreta. Por lo pronto, la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Transportes debe comenzar por la definición de su posible trazado, sin que se disponga todavía de plazos concretos para ejecutar esa tarea.
Hasta el momento, solo se han manejado algunos planos iniciales sobre cual podría ser ese posible recorrido, heredados de la planificación que se esbozó hace diez años. Así que el departamento autonómico que dirige Arcadi España debe evaluar y actualizar esas primeras proyecciones para llegar a disponer de un itinerario viable mediante la redacción de los primeros estudios que podrían licitarse con cargo a los presupuestos autonómicos de 2021.
En principio, la alternativa más sencilla continúa siendo la de construir un ramal desde el trazado que comparten las líneas 4 y 5, entre el Centro y Playa de San Juan. De hecho, se trata de la opción planteada por el propio Ayuntamiento de Sant Joan en 2018: un enlace con un recorrido compartido al 80% con esas dos líneas que se separaría de su trazado actual, por la calle Fotógrafo Francisco Cano a la altura del Parque de la Marjal, para discurrir por la avenida del Pintor Pérez Gil hasta llegar al centro hospitalario, donde se situaría su parada término. En realidad, solo resultaría necesario ejecutar un nuevo tramo de vías de poco más de un kilómetro de longitud, de modo que la nueva línea compartiría las paradas previas de las líneas 4 y 5 desde Luceros hasta Condomina.
Con esa alternativa, se abriría la puerta a una hipotética prolongación posterior por la avenida de Miguel Hernández (el trazado de la travesía de la N-332) hasta llegar al centro del casco urbano de Sant Joan. Desde ahí, además, la línea se podría extender en el futuro hasta Mutxamel. Lo cierto es que el ayuntamiento de este tercer municipio también ha reivindicado la conexión con la red Tram para mejorar la movilidad comarcal con un trazado hasta cierto punto similar.