ORIHUELA. El pasado lunes fue el primer día en el que el comercio local y la restauración de toda la comarca podía abrir de nuevo sus puertas. Orihuela es uno de los municipios de la comarca con mayor volumen de actividad económica en cuanto a comercio a local, principalmente por su variedad. Las terrazas de bares y cafeterías volvían armar sus mesas y sillas. La mayoría de las tiendas retomaban también su actividad. Las aceras acogían de nuevo a viandantes. Transcurrida una semana de eses momento, la Asociación de Comerciantes de Orihuela valora con cierto optimismo los primeros siete días de la reapertura de los negocios tras dos meses de parón por la pandemia de la covid-19.
"Desde la asociación estamos contentos porque parece que la gente está respondiendo bastante bien desde que hemos vuelto a abrir, parace que están confiando otra vez en el comercio local y se han dado cuenta de la importancia que tiene" señala Adolfo Valero, persidente de la Asociación de Comerciantes de Orihuela. Añade además, que una de las razones de esta vuelta a la confianza en el comercio local se basa en un gesto de solidaridad y una forma de mantener vivas las calles. "Se han dado cuenta de que el comercio local es el que mantiene vivo las calles" afirma. La relativa y momentánea valoración positiva del arranque constrasta con la realidad de que no se va a recuperar lo de meses atrás, "pero ha sido un inicio productivo y esperanzador".
La asociación cuenta con cien establecimientos asociados, que acoge a todos los sectores. De ese centenar, esta semana han abierto 72 comercios. La mayoría de los que no han abierto son establecimientos de restauración. Éstos esperan reabrir el próximo lunes, cuando, si no hay parámetros desfavorables se hará efectivo el paso a la fase 2. Esto supondrá que además de las terrazas, con capacidad para ocupar el 50%, podrán dar servicio en el interior del local a un 30% de su aforo.
Según los datos de la Policía Local, en esta semana se han clausurado cuatro establecimientos de hostelería, tres en Orihuela ciudad y una en una pedanía, por no cumplir con las medidas indicadas como condición para la reapertura de bares y cafeterías. Este cese de la actividad ha sido un aviso para que en 48 horas subsanen las carencias. Desde la Policía Local indican que ante reiteración se procederá a la propuesta de sanción, que puede alcanzar los 6.000 euros.
Las dos principales calles que concentran a un mayor número de negocios son la calle San Pascual y calle Mayor. "Está abierto casi al completo" señala Valero.