ALICANTE. El mapa del emprendimiento en España incorpora este año una referencia que sitúa a la Comunitat Valenciana en el eje del análisis. Según el Informe Emprende 2025, elaborado por Holded, entre el 5% y el 10% de los emprendedores del país desarrolla su actividad principal en este territorio. El documento, construido a partir de 1.515 entrevistas a emprendedores activos y retirados, ofrece una radiografía detallada sobre el estado actual de las pequeñas empresas y el ecosistema emprendedor en España.
El informe describe un escenario en el que las pymes representan el 99,8% del tejido empresarial del país. Son responsables del 72% del empleo privado y del 65% del PIB empresarial, lo que las sitúa como base operativa del sistema productivo nacional. Las microempresas (aquellas con menos de 10 empleados) constituyen el 94,4% del total, una estructura que condiciona la capacidad de acceso a financiación, la inversión en tecnología y el ritmo de transformación digital.
El análisis sitúa a la Comunitat Valenciana en un tramo intermedio del mapa emprendedor, con un peso de entre el 5% y el 10% del total. El liderazgo lo tiene la Comunidad de Madrid, que supera el 20% del emprendimiento del país, mientras que el territorio valenciano forma parte del grupo de regiones que consolidan la distribución geográfica del emprendimiento en España, compuesto por zonas urbanas y entornos económicos diversificados. El peso valenciano se contextualiza en un escenario en el que seis de cada diez emprendedores considera que su sector crecerá en los próximos años. El estudio recoge que esta expectativa está vinculada a la digitalización, la inteligencia artificial y la sostenibilidad como motores de evolución.
Motivaciones y perfil del emprendedor
El informe detalla que la franja de edad más representada en el emprendimiento español se sitúa entre los 31 y 43 años, con un 36% del total. Los hombres suponen el 56% de las personas emprendedoras, mientras que las mujeres representan el 44%, una proporción que el estudio identifica como consolidada. Las motivaciones principales para iniciar un proyecto son la búsqueda de independencia financiera y la posibilidad de establecer un equilibrio entre vida y trabajo, especialmente entre quienes se encuentran en tramos de edad intermedios.
Los valores más mencionados por los emprendedores son el esfuerzo, la creatividad y la capacidad para asumir riesgos. Los obstáculos más señalados son los costes laborales, la competencia, la incertidumbre económica y la burocracia administrativa. El entorno personal es determinante en el inicio y sostenimiento de los proyectos: el 54% afirma apoyarse principalmente en familia y amigos.
El estudio también identifica diferencias sectoriales por género. Según los datos, las mujeres emprenden más en sectores vinculados al consumo y al cuidado, mientras que los hombres lo hacen en tecnología e infraestructuras. Los emprendedores más jóvenes priorizan la sostenibilidad y el impacto social, mientras que los de mayor edad valoran la autonomía y la seguridad económica.
Innovación, digitalización y barreras
La innovación continúa siendo uno de los retos del tejido empresarial. Solo el 18% de las pymes se considera innovadora, frente al 52% de las grandes empresas. La inversión media en innovación alcanza el 1,2% de la facturación, comparado con el 3,5% en compañías de mayor tamaño. Además, más del 60% de los emprendedores afirma haber tenido dificultades para acceder a crédito bancario, y apenas uno de cada cuatro considera adecuado el apoyo institucional existente.
Pese a esta situación, la digitalización está presente en el 96% de los negocios emprendedores. El uso de herramientas en la nube y de redes sociales es mayoritario. Un cuarto de las personas emprendedoras atribuye parte del crecimiento de su negocio al uso de redes sociales. La colaboración con asesorías externas sigue siendo una práctica extendida: el 50% de los emprendedores trabaja con una asesoría, especialmente en sectores como la hostelería o la construcción.
Los frenos a la digitalización más profunda son el coste (37%), la falta de conocimiento (28%), la dificultad técnica (26%) y la falta de tiempo (26%). El estudio también subraya que el ahorro de tiempo por la adopción de herramientas digitales depende del tamaño de las empresas: en aquellas con más de 10 empleados, más del 40% declara ahorrar más de 20 horas mensuales.
Sectores y tendencias de crecimiento
El informe identifica a las energías renovables como el sector con mayor expansión, con un incremento del 28% en facturación y un 20% más de empresas respecto al año anterior. También señala crecimiento en las soluciones SaaS para pymes, el comercio electrónico local, la salud digital y la logística urbana. Las empresas con más posibilidades de supervivencia son aquellas que combinan un alto grado de digitalización, apertura internacional e inversión continua en innovación.
El documento destaca que las microempresas representan más del 92% tanto de las altas como de las bajas de negocios anuales. Este dato refleja la rotación que caracteriza al tejido emprendedor español y explica parte de las tensiones vinculadas a la financiación y la estabilidad.
La Comunitat Valenciana en el contexto estatal
En este marco, la Comunitat Valenciana se sitúa en un rango relevante del emprendimiento español, con entre el 5% y el 10% de los emprendedores nacionales desarrollando su actividad en el territorio. Este peso coloca a la región en un tramo medio del mapa emprendedor y refuerza el papel de las comunidades con tejido económico diversificado fuera de los dos grandes polos (Madrid y Cataluña) que tradicionalmente concentran los porcentajes más elevados. El informe no detalla sectores específicos de especialización en la Comunitat, pero la presencia de un volumen significativo de emprendimiento se vincula con las dinámicas que el estudio describe para el conjunto del país, con el predominio de microempresas, impulso de la digitalización, obstáculos vinculados a la financiación y expectativas de crecimiento asociadas a la tecnología y la sostenibilidad.
