El proyecto Surfplast, liderado por el Instituto Tecnológico del Producto Infantil y de Ocio (Aiju) y con la participación de varias empresas de la Comunitat Valenciana, encara su fase final con resultados que abren nuevas posibilidades para la industria plástica. La iniciativa busca sustituir tratamientos químicos tradicionales por soluciones sostenibles basadas en tecnologías físicas limpias, como el recubrimiento por deposición física de vapor (PVD).

Uno de los avances más relevantes es la alternativa desarrollada al mordentado químico con cromo hexavalente, un compuesto prohibido en la Unión Europea por su toxicidad. El equipo ha logrado recubrimientos funcionales con cobre, que aportan conductividad, adherencia y resistencia sin recurrir a procesos contaminantes.

El proyecto también ha explorado el potencial del microtexturizado láser en plásticos fabricados por impresión 3D, replicando patrones inspirados en la hoja de loto. Estas superficies autolimpiables y repelentes a la suciedad se protegen con recubrimientos de nitruro de titanio (TiN), lo que mejora su durabilidad en aplicaciones como moldes prototipo.

Además de las propiedades técnicas, Surfplast ha demostrado su aplicación en el ámbito estético. Mediante el uso de PVD con cromo, se han conseguido acabados brillantes y resistentes que resultan especialmente atractivos para sectores donde la apariencia es un factor de valor añadido, como el juguete, la automoción o el herraje.

Empresas como Muñecas Antonio Juan, Satis y Accesorios y Resortes SL han validado los desarrollos en condiciones reales de producción. Gracias a estos avances, la industria plástica valenciana refuerza su posición en Europa dentro del campo de los recubrimientos funcionales, con nuevas oportunidades para ganar competitividad en mercados exigentes.

Los recubrimientos tanto metálicos como no metálicos sobre plásticos o metales se emplean para una gran variedad de aplicaciones, entre las que se encuentran aquellas con fines decorativos y ópticos. Su implementación en el ámbito del plástico, "situará a la Comunitat Valenciana y en extensión a Europa en una situación de ventaja competitiva, dado que la demanda para continuar recubriendo plásticos sigue siendo elevada".

El proyecto está financiado por IVACE+I (IMDEEA/2024/114).