ALICANTE. La provincia de Alicante se sitúa en el puesto 47 del país en cuanto a base media de cotización a la Seguridad Social, con una cifra de 1.956 euros, según el Instituto de Estudios Económicos de la provincia de Alicante (Ineca). Este indicador refleja la media de los salarios sobre los que cotizan las personas trabajadoras alicantinas y se encuentra muy por debajo de otras provincias españolas, lo que se traduce en una menor capacidad de generación de renta por habitante y, en consecuencia, en un PIB per cápita reducido. La situación actual refleja un reto estructural para la provincia. Aunque Alicante cuenta con un elevado número de cotizantes y un PIB total que la coloca entre las provincias más relevantes del país, la baja cuantía de sus salarios medios limita su desarrollo en términos de renta per cápita. El peso de sectores con baja base media de cotización y la persistente brecha salarial entre hombres y mujeres configuran un escenario en el que la mejora pasa por una transformación del tejido productivo.

En la provincia de Alicante el número de cotizantes total del régimen general es de 573.548 personas, la quinta posición en España. De ellas, 279.952 son mujeres y 293.596 son hombres. Si las bases medias de cotización en total dan una cifra de 1.956 euros, en el puesto 47 en el país, en mujeres el sueldo baja a 1.831 euros, frente a los 2.076 euros de los hombres, según (Ineca) dejando patente, también una brecha de género salarial. 

Con los últimos datos disponibles, del año 2022, las diez provincias con mayor PIB son las siguientes, quedando la provincia de Alicante en quinta posición con 41.757 millones de euros, superando por poco a la provincia de Vizcaya.

La comparación de estas cifras con las posiciones que ocupa Alicante en el conjunto del país revela un contraste llamativo. La provincia se sitúa en quinta posición nacional en cuanto a Producto Interior Bruto total, con 41.757 millones de euros en 2022, lo que supone un 2,3% de la riqueza española. Sin embargo, cuando se analiza el PIB per cápita, la posición desciende hasta el puesto 44, muy alejada de provincias como Vizcaya, que ocupa la cuarta posición. Según Francisco Llopis, director de Estudios de Ineca, "esta baja posición de Alicante viene generada en gran medida por los bajos salarios de los trabajadores alicantinos", y se comprueba que, prácticamente, la posición nacional en PIB per cápita viene correlacionada con los salarios recibidos por los trabajadores. Así en PIB per cápita Alicante ocupa la posición 44º (año 2022), mientras que en salarios se baja hasta la 47º (marzo del 2025).

Así, en el caso de la provincia de Alicante se aprecia que muchas de las actividades con menor base media de cotización, y que en definitiva son sus salarios, están bastante presentes. Es el caso por ejemplo de las actividades administrativas de oficina y otras actividades auxiliares a las empresas, la industria del cuero y del calzado, la asistencia en establecimientos residenciales, el comercio al por menor, excepto de vehículos de motor y motocicletas, las actividades de servicios sociales sin alojamiento, los servicios a edificios y actividades de jardinería, las actividades deportivas, recreativas y de entretenimiento, otros servicios personales y en último lugar, servicios de comidas y bebidas.

Brecha de género en la base de cotización

Los datos también evidencian una brecha de género en las bases medias de cotización. Mientras que los hombres cotizan, de media, por 2.076 euros, las mujeres lo hacen por 1.831 euros. Esto supone que la base media femenina se sitúa un 11,8% por debajo de la masculina en la provincia de Alicante.

En cuanto a la distribución por sexos en el mercado laboral provincial, las mujeres representan el 48,8% de los cotizantes del régimen general en Alicante. Pese a esta presencia equilibrada en términos numéricos, las diferencias en la base de cotización implican que las trabajadoras reciben retribuciones menores y, por tanto, su base tiene menos peso en la media provincial.

Una de las consecuencias directas de estas cifras es una menor capacidad para escalar posiciones en el ranking de PIB per cápita. Según Ineca, para mejorar este indicador sería necesario modificar la composición sectorial de la economía provincial, impulsando la implantación de actividades con mayor valor añadido y elevando las retribuciones de los trabajadores.

Además, el organismo subraya que es preciso aumentar el tamaño medio de las empresas alicantinas, con el objetivo de mejorar la productividad y la competitividad. Esta medida permitiría, a medio y largo plazo, incrementar las bases de cotización y, por ende, la renta media por habitante.

En palabras de Ineca, "la mejora del PIB per cápita pasa necesariamente por una mejora en la composición de las actividades presentes en la provincia y de las retribuciones de sus trabajadores”, lo que exige no solo atraer empresas de mayor valor añadido, sino también aumentar la dimensión media de las existentes para elevar la productividad y, con ello, los salarios.