VILLENA. La Concejalía de Obras ha finalizado la actuación de mejora en la avenida de Elda, en el tramo comprendido entre la calle Cruz de Mayo y Navarro Santafé, con la que el Ayuntamiento da un nuevo paso en su plan de modernización del viario urbano. Los trabajos, ya concluidos, han permitido ampliar las aceras hasta los 1,40 metros de anchura, lo que facilita el tránsito de personas con movilidad reducida y de carritos de bebé. En total, se ha incrementado en 280 metros cuadrados la superficie peatonal de esta vía.
El concejal de Obras, Sergio Palao, explicó que la intervención no solo ha consistido en la ampliación del acerado, sino también en la renovación de diversas infraestructuras “obsoletas”, entre ellas las arquetas de aguas residuales y las acometidas de agua potable, que han sido sustituidas por conducciones de polietileno para mejorar su rendimiento y durabilidad.
“Dentro de nuestra programación de mejora seguimos construyendo con actuaciones como esta una ciudad más moderna, más segura y con mejores prestaciones”, destacó el edil. Palao recordó que muchas de las calles del entorno datan de los años 60 y requieren intervenciones profundas para adaptarlas “a las exigencias del siglo XXI”.
En relación con el estacionamiento en la zona, el concejal señaló que el equipo de gobierno mantiene su propuesta de crear un aparcamiento de grandes dimensiones en el entorno del barrio, una infraestructura con la que se pretende cubrir las necesidades actuales y, al mismo tiempo, reorganizar el tráfico y el aparcamiento en superficie.
La actuación se enmarca en la estrategia municipal de renovación urbana y mejora de la accesibilidad en distintos puntos de la ciudad.