ELCHE. La licencia de obras para reforma y ampliación de vivienda unifamiliar en la pedanía de La Baia del alcalde Pablo Ruz se otorgó en dos meses, cuando la media para actuaciones de este tipo suelen estar entre los seis y ocho meses. Así lo ha desvelado este martes el grupo socialista, que pide al regidor que comparezca para explicar por qué en su caso los plazos han sido tan ágiles. Desde el partido quieren saber si ha podido haber trato de favor por su condición de alcalde. La concejal Patricia Macià, quien ha advertido sobre este hecho, subraya que primero piden explicaciones, y que después estudiarán si hay que pedir informes a técnicos o secretario, y si hubiere que seguir otra vía más adelante.

Licencia en tiempo récord

En retrospectiva, el pasado 18 de julio se aprobó en Junta de Gobierno la licencia para el proyecto de Ruz, para el cual se ausentó en la votación del mencionado punto. Algo habitual en este tipo de situaciones. Pero para los socialistas el hecho diferencial es que solicitó le permiso el 8 de mayo, logrando una autorización en tiempo récord en comparación con las licencias habituales. Macià arguye que no les interesa si el alcalde se ha comprado una casa o un chalet, "porque eso es algo personal y queremos dejarlo bastante claro". Y agrega que "como grupo municipal nos sorprende que ambas licencias se den con tanta celeridad en contraposición a un estudio de las licencias de todo tipo que hemos hecho". Desde el 9 de enero hasta el mes de julio, hasta donde disponen de actas de junta de gobierno, son 262 las licencias que han contabilizado. 

Y aseguran que para reformas de casa unifamiliares y similares como la mencionada, "la media está en 8 meses". Añaden, de forma extra, que la licencia para la extensión de la línea eléctrica, para el suministro de la nueva vivienda, se concedió en un mes y 9 días. La licencia de obras para la reforma, ampliación de la vivienda y la piscina, en 2 meses y 10 días. "Ninguna de las iniciativas de estas características se ha dado en dos meses. Tan solo la del alcalde", asegura Macià. La concejal pone de ejemplo que solicitudes de particulares como una del 20 de marzo o del 29 de mayo para lo mismo, tardaron ocho meses. "Debe estar muy contento", apostilla.

La edil también apunta que tampoco hay licencia solicitada para el vallado, lo cual tendrá que pedirse. Eso sí, esgrime que viendo las redes sociales tanto del regidor como del despacho de arquitectura, aunque la licencia es de reforma, sugiere que han jugado al máximo con las posibilidades de licencia, al haberse derruido casi al completo la antigua casa de campo. "Poco ha quedado de esa casa", dice Macià. "Está tirada prácticamente". "Se le concede el viernes 18 de julio la licencia y el martes ya estaban en obras".

Los tiempos de otras licencias urbanísticas

Sobre otras comparaciones, la concejal, mostrando los expedientes, asegura que "los ciudadanos o empresas que han solicitado licencia de obras para una vivienda familiar con piscina han tenido respuesta entre los 5 y los 45 meses, y aquellos que han solicitado licencia para cambio de uso de local a vivienda, que son muchas, han tardado entre 5 y 13 meses". En este sentido, en la relación de licencias en 2 meses solo se han concedido licencias, según los socialistas, para modificar una licencia ya concedida para nstalación fotovoltaica de autoconsumo o la reparación de unos de unos daños en un pavimento. "Cuestiones realmente mucho menores".

"¿Cómo es posible que la ciudadanía o las empresas que solicitan licencias tardan en recibir el justo bueno una media de entre 6 y 20 meses y el alcalde la recibe en un poco más de 2 meses? Queremos que el alcalde salga a dar explicaciones de por qué ha pasado esto, qué ha hecho para que se le conceda la licencia de obras tan rápidamente a diferencia del resto de mortales", inquiere la edil. La actuación sobre una típica casa unifamiliar, de dos plantas, tiene un valor de 80.000 euros. En la puerta de la misma hay un render del proyecto con el despacho de arquitectura y el número de licencia.

"El Ayuntamiento es su casa"

En resumidas cuentas, para los socialistas, según declaran, la sensación es que "se piensan que el Ayuntamiento es su casa y pueden hacer lo que les venga en gana. Todo vale". Y hacen mención una vez más al supuesto conflicto de intereses en el que dicen podría incurrir el edil de Haciena, Francisco Soler, al reducir su dedicación exclusiva para volver a la actividad privada parcialmente en su despacho de asesoría. Pero también sobre el ciberataque. "Se nos niegan las actas del comité de crisis a pesar de que los asesores y cargos de confianza sí que pueden tener esas reuniones, pero no los representantes municipales de la oposición que representamos a miles de votantes".

Para Macià, "hablan de normalidad, cuando la evidencia demuestra que eso es mentira. Pero ellos siguen mintiendo y sin decir qué es lo que están haciendo ni lo que se ha perdido ni lo que se va a recuperar. Tengo que decirles que a día de hoy no saben sabemos absolutamente nada de este tipo de cuestiones". La concejal lamenta que llevan desde julio sin obtener datos solicitados bien de facturas, bien de presupuesto. Con la llegada de agosto y a finales el ciberataque, tienen ahora que ir físicamente a despachos a pedir documentación en los ordenadores que funcionen. "Pedimos un informe al secretario hace 13 días sobre la incompatibilidad del señor Soler y aún estamos a la espera de respuesta".