ELCHE. El equipo de gobierno ya ha presentado cómo será la reurbanización de la Plaza del Congreso Eucarístico. Una actuación que remodelará el actual pavimento, castigado por el paso de los años, y que implicará la renovación de todo el entorno de la basílica de Santa María con uno de piedra natural y nuevo mobiliario, eliminando las barreras arquitectónicas como los escalones, facilitando la accesibilidad mediante pequeñas rampas. Además, como ya se avanzó, se plantarán árboles de gran porte. Eso sí, las obras aún se tienen que licitar. Como pronto, llegarán a finales de 2025, con un precio estimado de hasta 2,2 millones de euros. El plazo de las obras será de cuatro meses.

El proyecto básico, presentado este miércoles, y realizado a cargo del despacho ARN Arquitectos, encargados de elaborar el nuevo catálogo de protecciones, se ha enviado a la conselleria de Cultura para que lo analice. Paralelamente, la propia firma se encarga de redactar el proyecto de ejecución, el cual se quiere sacar a licitación en el segundo semestre del año, con el objetivo de tenerlo adjudicado en el mes de noviembre. De ahí que como pronto las obras lleguen a finales de este ejercicio. 

Posible adjudicación en noviembre

Además, hay que recordar que este año se celebra el Año Jubilar y hay Misteri d'Elx extraordinario en octubre, por lo que el departamento de Vía Pública tendrá que ir calibrando cuándo empezar la obra. Asimismo, como se ve en el render, hay arbolado que está frente al templo, por lo que podría dificultar las procesiones, pero según explica el edil del área, Claudio Guilabert, se habilitará para no obstaculizar los actos que tienen lugar en el entorno, desde el Misteri hasta procesiones de Semana Santa. En cualquier caso, también quedará una parte de la plaza despejada para distintas celebraciones que tengan lugar. 

Excavaciones arqueológicas

"No será un proyecto invasivo de la plaza", adelanta el edil, tanto con el arbolado, como con cuestiones como que a partir de entonces no se podrá taladrar el suelo. Es más, antes de que inicien las obras, el Ayuntamiento va a impulsar otro contrato de catas arqueológicas por unos 47.000 euros para hacer dos zanjas para ver hasta qué superficie se puede trabajar sin que aparezcan restos que puedan obstaculizar las obras. No hay que olvidar que el entorno es Bien de Interés Cultural (BIC) al formar parte del Conjunto Histórico Artístico, y además de posibles hallazgos por ser zona candente a nivel arqueológico, es conocido que bajo está el viejo cementerio, además del antiguo barrio, las 'Casas de la Virgen'.

También se necesitan ambas zanjas para saber la profundidad hasta la que se pueden y se deben plantar los árboles, así como las zapatas para la renovación de las luminarias, que también entran en el proyecto. Y ver asimismo la posible instalación de servicios de agua. El propio alcalde Pablo Ruz apuntó en su día que quizá se podría instalar una fuente, lo que aún no es seguro, aunque al bipartito gusta el concepto de "plazas con agua", explicaba Guilabert, por lo que según lo que arrojen las catas, se podrá conocer. La posible fuente está supeditada a si se pueden instalar canalizaciones. En cualquier caso, el Ayuntamiento ya cuenta con un estudio geotécnico de la zona. 

Transformación de todo el entorno

Así pues, una obra de envergadura, porque salvo la plaza de Santa Isabel, ya reformada, se renovará toda la parte que circunda la basílica, integrando también la calle del Colegio de Abogados, y la parte junto a la mutua que da a Traspalacio, buscando tramos con sombra y más cómodos para los viandantes. Las terrazas de los establecimientos de hostelería tendrán un pavimento diferente, eso sí, todo nivelado, salvo las pequeñas rampas que jugarán a varios niveles. Por último, también se habilitará la plaza para que las escorrentías vayan hacia la calle Fatxo y no acumular agua en la zona de la torre. Cada hito del proyecto, al ser área BIC, se tendrá que dar de la mano de Cultura.