ALICANTE. El desarrollo paralelo de las obras de mejora peatonal y calmado de tráfico iniciadas desde hace dos semanas en el eje Marvá-Gadea y en el Paseo de los Mártires de la Libertad se aplazó hasta los meses centrales del verano con el fin de minimizar perjuicios al conjunto de los alicantinos respecto a los que se habrían generado en el caso de haberlas abordado en cualquier otra época del año. Esa es, cuando menos, la posición que defiende el equipo de gobierno, ahora compuesto por el Partido Popular (PP) en solitario, respecto a la coincidencia del inicio de esos trabajos asociados a la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en los meses de julio y agosto, que se alargarán hasta final de año en el caso de la remodelación del eje Marvá-Gadea.
Así lo ha manifestado el portavoz del equipo de gobierno, Manuel Villar, en la comparecencia semanal en la que se da cuenta de los acuerdos alcanzados en Junta Local, al sostener que "posiblemente no nos lo reconocerán, pero seguimos pensando que es la mejor fecha" en la medida en que los meses vacacionales disminuye la intensidad de tráfico al reducirse los desplazamientos por motivos de trabajo o vinculados al desarrollo del curso escolar.
Es más, Villar ha señalado que, según la información analizada de forma diaria por los técnicos de Movilidad, "cada día resulta menos problemático" que el anterior, ya que "los ciudadanos han buscado recorridos distintos para realizar sus desplazamientos". De igual modo, ha sostenido que todo parece indicar que "a partir del 15 de julio" se percibirá "una mejora relevante" al iniciarse el periodo en el que se concentra la mayor parte de los descansos vacacionales entre la ciudadanía, lo que conllevará una nueva reducción de la cifra de desplazamientos diarios, así como su concentración en los horarios de inicio y fin de la jornada laboral.
Ese análisis contrastaría con las quejas planteadas por representantes de varios sectores vinculados a la actividad turística como el comercio, la hostelería, la hotelería, el ocio y los apartamentos turísticos, que persisten en alertar sobre cancelaciones, anulaciones de reservas o incluso despidos del personal que habían contratado para afrontar las expectativas de la temporada turística por la merma de negocio que atribuyen a las molestias que entrañan las obras.
Esa situación es la que llevó a ocho asociaciones representativas de esos sectores a solicitar una reunión urgente con el alcalde, Luis Barcala, con el propósito de plantearle propuestas alternativas de ordenación del tráfico que permitiesen aliviar los problemas que se estarían generando en la actualidad. Ese encuentro ha quedado concertado para este próximo viernes, día 14, como informó este diario el pasado viernes al dar cuenta del índice de ocupación registrada en los hoteles asociados a APHA durante el mes de junio.
Plazos y compensaciones
En todo caso, Villar ha vuelto a reconocer que la ejecución de las obras generan "atascos y molestias" por lo que ha insistido en "pedir disculpas" y agradecer la comprensión o "deportividad" con la que se estarían asumiendo las restricciones a la movilidad propiciadas por las obras. De igual modo, ha agradecido la implicación de las empresas adjudicatarias de las obras al sostener que los trabajos "avanzan a ritmo, con el programa previsto" para resaltar que se ha llegado a anticipar la reapertura del cruce entre Reyes Católicos y Doctor Gadea, por ejemplo.