ELCHE. Ni para aprobar la Mesa Local del Agua, pedir un centro de salud para Torrellano, aumentar recursos para combatir la violencia de género, condenar el abuso infantil, espacios para la Memoria Democrática y ni casi para planes para impulsar el Camp d'Elx. No hubo unanimidad en ninguno de los temas locales tratados en el pleno de este lunes, con grados de desacuerdo en distintos niveles según el tema, y que muestran la gran separación que existe entre ambas bancadas. Entre poca cintura y poco espíritu de querer ceder, las relaciones entre PP y Vox y PSOE y Compromís pasan por su momento más frío de la legislatura. Apenas hay debates constructivos y sí una crispación cada vez mayor.
Aunque a priori las mociones a debate parecía que sí podrían proyectar esa imagen de unidad o de consenso en temas locales relevantes, no hubo lugar a ello. Un pleno que se fue agriando conforme avanzaba, incluso con pequeños reproches en el seno del Ejecutivo, especialmente de la portavoz de Vox a la presidenta del pleno, Irene Ruiz (PP) por el control de los tiempos. O alguna pullita en clave elecciones americanas, con el edil Raúl Sempere de Vox contestando "hagamos el campo de Elche más grande otra vez" parafraseando a Trump para responder al "Yes, We Can" de Obama que había hecho previamente el concejal popular José Antonio Román para impulsar el Camp d'Elx.
Si bien la tendencia de los plenos ya se viendo tiempo y tampoco supone mayor novedad, tuvo su cristalización en la parte final, con tres mociones in voce en las que PSOE y Compromís pidieron al alcalde que impusiera mesura para evitar una mayor polarización. Así, salvo en una moción respecto al Camp d'Elx, las mociones impulsadas por PP y Vox solo salieron adelante por su voto favorable, y las de PSOE y Compromís fueron rechazadas por el Ejecutivo. Antes de las mociones, ya en esa aprobación de la Mesa Local del Agua, en la que se incluyeron todas las enmiendas habidas en el proceso, la oposición se abstuvo, con el PSOE señalando que se temían que fuera otro "espacio para confrontar con el Gobierno".
Sin acuerdo para centro de salud en Torrellano
A partir de ahí, ya entraron las mociones. Algunas de ellas con las respectivas enmiendas que veladamente o no, a veces se utilizan sabiendo que el rival nunca pasaría por ahí, de forma que no se da el respaldo. La primera presentada, de Compromís, relativa a reclamar a la Conselleria de Sanidad la construcción de un centro de salud en Torrellano, ofreciendo suelo comprado por el Ayuntamiento, fue rechazada. Esther Díez recordó que era medida de Ruz en campaña, que se pidió al Consell y que este redujo la propuesta a reformar el Consultorio del que no hay novedades. La concejal rechazó las enmiendas de Vox y PP, que planteaban instar a pedir un nuevo Consultorio.
Compromís puso de relieve que PP y Vox ya habían votado en contra de la propuesta en juntas de distrito, y Vox preguntó por qué no lo habían hecho ellos en ocho años, apuntando que la moción era demagogia, un "brindis al sol" y "engañar a los vecinos", por ello votaron en contra al no aceptar la enmienda. El PP tan solo intervino en el debate por explicación de voto.
Violencia de género, diferente visión
Después fue el turno de los socialistas con la puesta en marcha y suma de recursos contra la violencia de género en Elche. El concejal Mariano Valera recordaba que han aumentado en veinte las violaciones en Elche respecto a 2023, un incremento del 122%, así como que el Consell no ha implantado la Oficina de Denuncia y Asistencia a las víctimas de violencia de género, "aunque estaba presupuestada". De nuevo fue rechazada, con el equipo de gobierno poniendo en valor lo que ya hacen. La concejal del ramo, Caridad Martínez, destacaba que ya ofrecen formación para la prevención. "Más campañas específicas contra el acoso (como ocio, buses, etc) y más puntos violeta", así como más talleres y formaciones en colegios.
Por su parte, Vox relataba que en efecto son datos graves, "pero la moción es pobre en contenido", decía Aurora Rodil, aprovechando para cargar contra la ley del 'Solo sí es sí', y vinculando una vez más ya no solo delincuencia, sino migración con abusos sexuales. "Lo que vienen por nuestras fronteras no son niños, son chicos con pelos en las piernas", agregaba, defendiendo "ley y orden" y "deportaciones". Como el resto, voto en contra. Eso sí, mostró una foto de Esther Díez con Errejón, a lo que la edil intentó defenderse por el reglamento del ROM, pidiendo la palabra por "emitir juicios de valor" que no se correspondía, pero la presidenta del pleno se lo negó.
Impulso al Camp d'Elx, casi acuerdo y cameo electoral... americano
Pequeños detalles que iban sumando y más mociones rechazadas por una cuestión u otra. La siguiente, del PP, para la elaboración de un Plan de dinamización del Camp d’Elx, tuvo algo más de consenso, aprobada con los votos a favor de PP, VOX y PSOE, y la abstención de Compromís. José Antonio Román explicaba que la idea es trazar un plan de digitalización, reducción de impuestos y trabas burocráticas, impulsar la difusión, relevo generacional, proyección internacional, etc. Compromís quería incluir la creación de un banco de tierras, o conectar oferta y demanda con parcelas en riesgo de abandono. Pero enmiendas rechazadas "porque ya están dentro, como el tratamiento de los residuos, y ya tenemos la Oficina del agricultor".
Algo que contrarió a Esther Díez, al entender que había acuerdo general en todo, "lo hacen para no cabrear a sus socios (de Vox)". Raúl Sempere, también edil de Pedanías por Vox, apoyaba la moción, contestando con la frase de Trump a la de Obama de Román que apelaba a la unión. Una vez más, con la ya habitual crítica a la Agenda 2030 o la legislación europea, así como a la diferencia de precios de productos de fuera de la Unión Europea o proyectos solares en el campo. El PSOE solo intervino para explicar el voto e instar a que lo ejecuten, porque son el gobierno.
El choque más ideológico con la educación sexual
La siguiente moción, otra que podría creerse que generaría consenso, de Vox contra el abuso infantil, acabó con el mismo resultado. Rodil hizo un duro alegato contra estas prácticas, también cargando contra los curas que las hayan perpetrado. La portavoz de la formación ultraconservadora no se quedó en medias tintas. "Prisión permanente no revisable para ellos y la Iglesia tendría que expulsarlos", a lo que añadía que "con las manos que se toca a Cristo en la eucaristía no se puede tocar a un niño". Rodil decía sentirse "avergonzada por los pecados de los curas".
De ahí que en la moción se propusieran medidas por el uso descontrolado de internet de los pequeños. Compromís intentó enmendar y pedía condenas en la Iglesia Católica y formación en educación sexual. No podía estar "más en desacuerdo por el abordaje en el contenido y herramientas para actuar, ustedes anteponen su ideología". Pedía "datos y rigor". La concejal del PP de Educación, María Bonmatí, destacó que ya hay charlas en institutos y cada vez más.
Pero como ya ha ocurrido en otras ocasiones, Vox considera "aberrante hablarle de sexo a los chavales, no amoldados a los chicos", y seguía diciendo que "es repugnante cuando la izquierda quiere poner imágenes sexuales en la cabeza de nuestros niños". Solo algunas de las intervenciones que para Compromís no eran exabruptos, sino "una animalada". Solo votó a favor el bipartito, con el PSOE aludiendo a los "límites que tiene que haber" en referencia al discurso de Vox y a la "actitud del PP, amparándolos".
Una moción sobre Memoria Democrática despachada rápido
Así llegaba la última moción ordinaria, de Compromís, sobre habilitar los espacios de la memoria en Elche. Una cuestión que ya se preveía, como otras, que no generarían acuerdo alguno, sino más bien lo contrario. Compromís defendió que se dieran a conocer las prisiones franquistas y no perder esa memoria colectiva, una de ellas el Palacio Altamira. El PSOE apoyando y criticando el vaciado de ese contenido en el proyecto de Germanías con el mantenimiento de la cruz.