BENIDORM. El Servigroup Hoteles Benidorm afronta este sábado una misión casi imposible ante el Barça (Palau d’Esports L’Illa de Benidorm, 19:00 horas), líder de la competición, que llega al partido enrabietado tras haber dejado escapar la pasada jornada la posibilidad de celebrar el título ante su afición, al perder su primer partido de los últimos siete años en cancha.

El equipo catalán está a un paso de cantar un nuevo alirón, aunque en el caso de ganar en Benidorm no será matemático, ya que deberá esperar a la jornada del domingo y a un posible tropiezo del Granollers, segundo, frente al Huesca, colista.

El Servigroup Hoteles Benidorm ha experimentado una notable mejoría desde la llegada al banquillo del técnico serbio, Mario Krivokapic, bajo cuya dirección el equipo ha ganado sus dos últimos compromisos, vitales para sus opciones de salvación.

La visita del Barça llega en un mal momento para el Servigroup Hoteles Benidorm, que en una semana deberá afrontar otros dos partidos ante Bidasoa y Huesca, este último casi definitivo en la lucha por la salvación.

El entrenador serbio no podrá contar con el argentino Ramiro Martínez, David Roca y Leo Alonso, todos ellos lesionados de larga duración.

Krivokapic calificó al Barça como “el mejor equipo” de la competición y pidió a sus jugadores, consciente de la dificultad de volver a sorprender al conjunto catalán, “que compitan y den la talla”.

“Hay que jugar y disfrutar del balonmano. Este partido también es para la afición. Cuanto más tiempo podamos estar en el partido, mejor”, sentenció.

La visita del Barça está rodeada siempre de un ambiente festivo en Benidorm. El club ha declarado el partido jornada económica y el equipo lucirá una camiseta, de color blanco, conmemorativa del 700 aniversario de la ciudad que, posteriormente, será sorteada entre los aficionados.