ALICANTE. Cambia la temporada y parte de los actores implicados, pero el despelote sigue siendo el mismo. El Hércules ha solicitado a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) que varíe el día de disputa de su encuentro en Ibiza y a una hora en el que el calor no haga estragos. Y es que el Departamento de Competiciones de la RFEF, siguiendo las indicaciones del operador televisivo, fijaba este jueves el inicio del choque de la segunda jornada que enfretará en Can Misses a albiazules y blanquiazules para las 16 horas del domingo 7 de septiembre... un auténtico disparate a estas alturas de verano y en pleno Mediterráneo.

"Queremos evitar golpes de calor o que alguien pueda pasar una mala tarde", decía Rubén Torrecilla este viernes, tras calificar de inhumano el horario y casi a la misma hora que en la isla de Ibiza su homólogo Paco Jémez apuntaba a los problemas de desplazamiento que tiene el Hércules. Realmente el club del Rico Pérez se ha encontrado con que el precio del alojamiento y de los vuelos es prohibitivo, como también tendrá serias dificultades para regresar tras el envite, toda vez que tanto por vía aérea como marítima las opciones se agotan a las 19 horas del domingo. El Hércules ya había advertido semanas atrás, antes de conocer el horario del choque, de los problemas de desplazamiento que representaba el encuentro: aunque la gestión de viaje la realice la agencia de la propia RFEF, son los integrantes de la expedición los que han de sufrir las incomodidades de los horarios y el club el que al final pague un servicio que en este caso tiene un precio prohibitivo por las fechas. La tardanza en fijar el horario ha multiplicado el peso de todo lo anterior y encima se ha elegido una hora para jugar que choca con la lógica.

LaLiga no quiere hacerse competencia a sí misma

En el Ibiza conciden en que el horario elegido está fuera de toda lógica y respaldan la petición del Hércules, algo fundamental para que la solicitud prospere, pero que no lo garantiza, toda vez que al final es el operador televisivo el que tiene la última palabra y este pone esos horarios para no hacer la competencia a su propio producto: la RFEF ha cedido la explotación de los derechos audiovisuales a LaLiga, quien pasa a producir los partidos y a emitirlos a través de su plataforma (LaLiga+), pero también a vender la señal a otros operadores como Movistar+. Como cabía esperar, los horarios de los envites elegidos buscan evitar coincidir con los de los encuentros del fútbol profesional, que en estas fechas también son muy peculiares para regatear el calor.

Es un cóctel peligroso que ha tardado pronto en estallar, afectando al Hércules de lleno... pero este y el Ibiza no son los únicos que lo van a sufrir. El Eldense y el Villarreal B han visto cómo habrán de jugar en el Nuevo Pepico Amat de Elda su choque de la segunda jornada desde las 12 horas del sábado 6 de septiembre. Otro disparate mayúsculo si no hay rectificación (huelga decir que el club azulgrana y el amarillo están valorando solicitar conjuntamente el cambio de horario).