ELCHE. El Atticgo Elche se ha clasificado para su tercera final consecutiva de la Liga Guerras Iberdrola tras hacer valer en el partido de vuelta de la semifinal ante el Mecalia Atlético Guardés (23-20) los cuatro goles de ventaja logrados en la ida.

El equipo ilicitano, que se enfrentará de nuevo en la gran final a Bera Bera San Sebastián, ha sufrido para eliminar al vigente campeón de la fase regular, que ha tenido un último ataque para lograr la clasificación detenido por la portera Nicole Morales.

La primera parte, en la que comenzó mandando el conjunto de Joaquín Rocamora, finalizó con ventaja mínima para el equipo local (10-9).

Un inicio de la segunda parte del Atticgo Elche, que estuvo 12 minutos sin anotar, permitió al equipo gallego darle la vuelta a la eliminatoria y mandar en el marcador por 14-9.

El equipo de Rocamora devolvió el parcial a su rival y tuvo el partido bajo control, pero un final accidentado, en la que sufrió dos exclusiones, le dio vida de nuevo vida al conjunto local.

Un lanzamiento de siete metros a diez segundos del final, anotado por Vanesa Rubio, y la posterior parada de Morales le dieron finalmente la clasificación al equipo ilicitano, que en una temporada que se intuía de transición repetirá, como mínimo, el subcampeonato del pasado curso.