ELCHE. Cuatro de las universidades públicas de la Comunitat, —la Universitat Politècnica de València, la Universitat de València, la Universidad de Alicante y la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH), han unido esfuerzos para contratar un servicio conjunto de ciberseguridad avanzada, con el fin de proteger sus sistemas informáticos frente a amenazas y ciberataques. Un contrato que se ha ajudicado Telefónica por tres años y un valor de 1,6 millones de euros.
La UMH, que ha actuado como entidad licitadora, ha liderado esta contratación agrupada que permitirá a estas instituciones contar con un Centro de Operaciones de Seguridad (SOC) que vigilará de forma ininterrumpida, las 24 horas del día y los 7 días de la semana, cualquier actividad sospechosa o incidente digital en sus redes.
El nuevo sistema incluirá servicios de detección de amenazas, análisis de riesgos, respuesta ante ataques y asistencia técnica especializada. Además, cada universidad contará con una plataforma de control personalizada, desde la que podrá gestionar alertas y recibir informes periódicos sobre el estado de su ciberseguridad.
Servicios a cargo de Telefónica
De todo ello se encargará Telefónica Soluciones de Informática y Comunicaciones SAU, que se ha impuesto entre las cinco compañías que aspiraban a hacerse con este contrato. El objetivo de esta contratación conjunta es mejorar la protección digital de las universidades de forma coordinada, eficiente y con mayor capacidad técnica. También se busca facilitar el cumplimiento de las normativas vigentes en materia de protección de datos y seguridad de la información.
Con esta iniciativa, las universidades valencianas refuerzan su infraestructura tecnológica en un contexto en el que los ciberataques son cada vez más frecuentes y sofisticados, especialmente en instituciones públicas, y siendo, al menos en la provincia, alguna de las cuentas pendientes a mejorar a cuenta de informes de la Sindicatura de Comptes de la Comunitat Valenciana en los últimos años. Cada una de las cuatro tiene una distribución económica similar con plurianualidades para estos servicios desde 2025 hasta 2028.
La ventaja de compra centralizada
Las compras centralizadas como esta permiten una respuesta común ante ciberincidentes, permitiendo compartir información y alinear los mecanismos de protección entre instituciones. También evitar duplicidades. La contratación conjunta reduce costes y recursos administrativos, evitando que cada universidad tenga que realizar su propio procedimiento de licitación para un servicio similar. Además, ahora todas las universidades tendrán acceso al mismo proveedor y tecnología, con configuraciones específicas por entidad, pero manteniendo una arquitectura común.