ALICANTE. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visita este jueves el aeropuerto de Alicante-Elche para anunciar las inversiones en la red de aeropuertos de Aena en los próximos. Y lo hará cuando la inversión de la Administración central no pasa por el mejor de sus momentos: de enero a julio de este 2025, la provincia de Alicante, que es la cuarta en términos de PIB y de población, sólo tiene obras en marcha por valor de 39 millones de euros, según los datos de la patronal de la obra pública Seopan. Con 39,3 millones, Alicante está situada en la parte media-baja del ranking provincial de inversión estatal, en el puesto 26 entre 52 provincias españolas, una posición muy desequilibrada en relación a su peso poblacional y económico.

Las grandes obras se circunscriben al Corredor Mediterráneo -los tramos Alicante-La Encina y La Encina-Xàtiva- y actuaciones en Carreteras: el tercer carril en la A7 entre Crevillent y Orihuela y las obras complementarias de la variante de Benissa. 

Si se hace la comparación con el mismo periodo de 2024, la inversión del Ejecutivo era más alta en la provincia. Según Seopan, la administración central licitó obras por casi 80 millones, por lo que en la actualidad la inversión supone un 50% menor. En el resto de España crece alrededor de un 15%. En la actualidad, Alicante solo recibe el 0,7% de la inversión en obra pública, pese que ocupa el cuarto lugar en la mayoría de las estadísticas y representa más del 4% de la riqueza nacional. Sin embargo, recibe seis veces menos de lo que le correspondería por su peso poblacional y económico.

En el caso de 2024, es verdad que finalmente la inversión del Gobierno alcanzó los 288 millones de euros, pero en este 2024 la cifra se ve más inalcanzable con los 39 millones de euros en obras que hay ahora en marcha. Y máxime cuando esa cifra crece en el resto de provincias, de ahí la sensación de agravio que vienen denunciando los empresarios; el Gobierno valenciano y el resto de instituciones locales. 

Sánchez y el ministro de Transportes, Óscar Puente, anunciarán inversiones futuras en todos los aeródromos de España, algo que también reclaman empresarios e instituciones tanto para el aeropuerto Miguel Hernández de Alicante como Manises en Valencia por su constante incremento de pasajeros. En el caso de Alicante-Elche, se reivindica la segunda pista; en Valencia, una ampliación integral. Estarán acompañados por la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant; la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, y el presidente y consejero delegado de Aena, Maurici Lucena.

Pero al margen de ello, hay proyectos relacionados tanto con el AVE como con el aeropuerto que son una incógnita en cuanto a su fecha de inicio. Es el caso de la variante de Torrellano, que debe permitir la conexión de Elche y Alicante con el aeródromo, además de la electrificación de la línea y la retirada de las líneas del frente litoral de la capital. En principio, el proyecto está desbloqueado y licitadas las redacciones de los proyectos, pero falta saber cuándo empezarán las obras. A nivel ferroviario sí que están en marcha las obras de mejora de la línea Alcoy-Xàtiva.

Ya en un segundo planto, también está pendiente conocer cómo se resolverá el desdoblamiento de la N-332 a su paso por Torrevieja y el futuro enlace de la AP-7 a su paso por Gata de Gorgos-Pedreguer. 

El propio aeropuerto tiene inversiones prevista para crear una nueva calle de aterrizaje, pero la obra reivindicada es la construcción de la segunda pista para ganar capacidad, como reclaman los empresarios y la Generalitat.

Inversiones millonarias para los aeropuertos

Las inversiones de Aena, el gestor aeroportuario controlado por el Estado con una participación del 51 %, se recogen en el Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA), que establece las condiciones que obligan al operador aeroportuario a ofrecer un servicio de calidad y con la capacidad suficiente para atender a la demanda durante el periodo regulatorio quinquenal.

El DORA I (2017-2021) recogía inversiones por valor de 2.646 millones de euros, de los cuales 2.185 millones correspondían a la inversión regulada (vinculada a las actividades aeronáuticas).  En el DORA II (2022-2026), aún vigente, la inversión total reconocida asociada a los servicios aeroportuarios básicos era de 2.250 millones de euros, con un nivel medio anual de 450 millones, en un contexto de elevada incertidumbre marcado por la recuperación de la pandemia ocasionada por la covid-19.

El pasado 1 de julio, el Consejo de Ministros aprobó una inversión adicional a las programadas en el actual quinquenio inversor de Aena por valor de 351 millones de euros. Se trata de inversiones que no pudieron preverse antes de la aprobación del DORA II y que adelantan actuaciones necesarias que, en cualquier caso, se realizarían en el siguiente periodo (de 2027 a 2031).

En concreto, son inversiones para adaptar las infraestructuras a nuevos requisitos normativos, para incrementar la seguridad y la ciberseguridad y disponer de unas instalaciones más robustas, generar eficiencias, así como para mejorar la experiencia del pasajero y reducir la afectación operativa por las obras en las terminales.

Dichas inversiones permiten avanzar en proyectos clave en aeropuertos como los de Alicante-Elche Miguel Hernández, Valencia, Bilbao, César Manrique-Lanzarote, Ibiza, Málaga-Costa del Sol, Menorca, Tenerife Norte-Ciudad de La Laguna o Tenerife Sur. El DORA III abarcará el quinquenio 2027-2031