VALÈNCIA. La delicada situación económico-financiera de la Comunitat Valenciana y el progresivo incremento del gasto público - especialmente por la mayor necesidad en Dependencia y Educación - "implicará una fuerte tensión a medio plazo", que requerirá de un "aumento considerable de ingresos" por parte de la Generalitat Valenciana. Así lo constata la Sindicatura de Comptes en su informe de fiscalización de 2024, entregado este lunes en Les Corts Valencianes.
El órgano estatutario - que publicó su informe anual en prórroga por cuarto ejercicio consecutivo - indica que la subida constante del gasto público es, en algunas partidas, "muy superior al PIB y difícil de reducir", pues existe una necesidad de expansión en Sanidad y Dependencia que se suma al gasto educativo y a "una gran distancia a cubrir en el resto de servicios para acercarse a los niveles medios del resto de comunidades autónomas".
Tal y como explicó este periódico, la Comunitat Valenciana - debido a su situación de infrafinanciación autonómica - destina nueve de cada diez euros de sus ingresos a cubrir los servicios públicos fundamentales (Educación, Sanidad y Dependencia), con lo que le queda un margen escaso para destinarlos a otras políticas y la inversión por habitante ajustado es ligeramente inferior a la media nacional.
Pese a la compleja situación financiera, lo cierto es que la Comunitat Valenciana debe seguir sosteniendo unos servicios públicos que cada vez requieren más recursos. La Sindicatura, en esta línea, advierte de que el gasto público seguirá creciendo y requerirá de un "aumento considerable de ingresos". El ente que encabeza Vicent Cucarella, expone tres vías para que se produzca este crecimiento de fondos públicos: una mejora del sistema de financiación autonómica, el aumento de bases imponibles por la expansión económica o un "incremento de la presión y esfuerzo fiscal".
El envejecimiento poblacional, factor clave en la necesidad de recursos
En "crecimiento incesante" del desembolso en materia sanitaria se debe, fundamentalmente, a cuatro factores: derivación de pacientes de Atención Primaria a hospitales, innovación tecnológica, alza de precios en los nuevos tratamientos y envejecimiento de la población. La Sindicatura recuerda que se espera un incremento del gasto anual del 2,1% hasta 2045. "Implicará una enorme presión sobre el sector público por su elevado peso en el conjunto del gasto", apunta.
En Educación, la Sindicatura constata el "estancamiento" inversor en el conjunto de España e indica que no se prevé un aumento significativo de la presión que hará este sector sobre el sector público. Una cuestión que viene motivada, en gran medida, por la disminución de la población en edad escolar. No obstante, sí se prevé un crecimiento en Educación Infantil, lo que implicará reasignar recursos entre niveles y, por tanto, que se mantenga la constante del desembolso en esta materia.
Respecto a la Dependencia, el envejecimiento de la población y la cronicidad han impulsado la demanda de este tipo de atención en los últimos años. Una cuestión que, cabe recordar, ha ido acompañada de una mejora en la cobertura a las personas mayores, que implica la necesidad de destinar más recursos a estos cometidos. Pese a los avances, la Sindicatura apunta a diferencias territoriales "porque la financiación estatal de las ayudas a la dependencia no llega al 50% previsto inicialmente", lo que provoca que esta materia dependa en gran medida de la capacidad de cada comunidad autónoma.
"Escaso margen de maniobra" de la Comunitat Valenciana
Por otro lado, el ente estatutario remarca en su informe que las diferencias entre territorios se observan especialmente en aquellas materias que no se encuadran en los servicios públicos fundamentales, como puede ser la industria, la agricultura, la energía, la investigación o el transporte. La Sindicatura expone que las autonomías que destinan mayor porcentaje de ingresos a Educación, Sanidad y Dependencia apenas tienen capacidad de gasto en el resto de servicios, lo que tiene un "gran impacto en los sectores productivos y su competitividad".
En esta línea, la Sindicatura ve "preocupante" el "escaso margen de maniobra" existente en el gasto público valenciano a nivel autonómico, tanto actualmente, como en el futuro "teniendo en cuenta la dinámica prevista de los servicios públicos fundamentales". "Puede resultar especialmente alarmante cuando se quiebre el comportamiento económico expansivo experimentado durante los últimos años", apunta esta institución, que remarca las advertencias científicas en torno al cambio climático y la falta de recursos básicos con el fin de que se anticipen las políticas sociales y económicas con suficiente antelación ante estos retos.
A ello, este órgano estatutario añade que las "tensiones bélicas y arancelarias", así como las previsiones de varios organismos internacionales, apuntan a que mantener el crecimiento económico en un futuro inmediato será "difícil". Para este órgano, un escenario de ausencia de crecimiento económico y de presión de mayor gasto público podría llevar a "serios problemas de prestación de servicios públicos".
"El sector público se ha desarrollado principalmente a partir del incremento de ingresos públicos ligados al crecimiento económico. Cuando eso no se ha producido, el gasto público ha sufrido duros recortes, incluso en servicios fundamentales", advierte la Sindicatura, que insiste en que el gasto sea "eficaz, eficiente y equitativo" para garantizar los servicios públicos universales. Además, considera "cada vez más urgente" que se aseguren e incrementen las fuentes de ingresos, así como que se evalúen las prioridades del gasto público, con el objetivo de aumentar la eficiencia y la eficacia.
