VALÈNCIA. El pasado 9 de diciembre, la Catedral de Valencia acogía una misa funeral organizada por el Arzobispado en memoria de los fallecidos por la Dana. Un acto al que acudieron varios ministros -aunque no el presidente Pedro Sánchez- y presidentes autonómicos, además de autoridades valencianas como el jefe del Consell, Carlos Mazón, la presidenta de Les Corts, Llanos Massó, o la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé.

Unos días antes, y a raíz de este acto, fuentes oficiales del Ejecutivo central preguntadas por esta misa aclararon que el Gobierno celebraría, en colaboración con las Generalitat Valenciana y las otras Comunidades Autónomas (CCAA) afectadas, un acto civil de homenaje a las víctimas cuando llegara "el momento adecuado". Una línea en la que también se manifestó la propia Bernabé un par de días antes de la ceremonia, cuando insistió en que el Gobierno de España movería ficha para arropar a los familiares de las víctimas. "El Gobierno tiene previsto hacer un acto de Estado para rendir homenaje a las víctimas", aseguró, si bien recordó que todavía se encontraban en plena búsqueda de personas desaparecidas.

No obstante, esta semana se cumplirán cinco meses desde la catástrofe y más de 100 días desde aquel anuncio sin que se haya producido novedad alguna respecto al citado acto de homenaje a las víctimas que debería impulsarse desde el Gobierno central liderado por Pedro Sánchez.

Preguntadas por este compromiso, fuentes del Ejecutivo central no concretaron si hay fechas previstas o preparativos en marcha, ni tampoco si se han producido conversaciones con la Generalitat Valenciana para concretar los términos del homenaje. Cabe recordar, tal y como publicó El periódico de España en diciembre, que desde el gobierno se emplazó a que descendiera el nivel de emergencia 2 -todavía activo en 28 municipios- y a encontrar a las tres personas desaparecidas, si bien las familias ya han iniciado los trámites en diferentes juzgados para declarar el fallecimiento una vez transcurridos los tres meses que marca el Código Civil sin noticias de estas víctimas.

Esta falta de información y aparente postergación respecto al compromiso de tener un gesto gubernamental con las víctimas de la Dana se une al papel distante que ha ejercido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con el territorio valenciano en estos meses. El líder socialista ha pisado la provincia tan sólo en cuatro ocasiones -una de ellas para el congreso del PSPV- en todo este tiempo. La primera fue para asistir a una reunión del Cecopi el 31 de octubre, día y medio después de la tragedia, mientras que la segunda fue la tensa visita a Paiporta el 3 de noviembre junto a los reyes, que terminó con el presidente del Gobierno marchándose de forma apresurada al ver comprometida su seguridad. 

Tras ese incidente, Sánchez tardó casi tres meses en regresar a tierras valencianas. Lo hizo pocos días antes de que se produjera el Congreso del PSPV mediante un acto con alcaldes afectados celebrado en la Delegación del Gobierno, una cita a la que no fue invitado el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón. 

Un balance, en lo que se refiere a la presencialidad, muy pobre por parte del jefe del Gobierno ante la que ha sido una de las mayores catástrofes naturales de España. En este sentido, resulta evidente y lógico que el grueso de las críticas públicas, mediáticas y judiciales se están centrando en Mazón y su Consell, dado que aglutinan las competencias en Emergencias, incluida la dirección del Cecopi, el control del 112 o la capacidad de avisar a la población, pero tampoco pasa desapercibida el manejo, con mando a distancia, que parece estar realizándose desde la Moncloa de la crisis; con un presidente del Gobierno alejado de las víctimas y el territorio y, en este caso, con un homenaje a las víctimas que también puede terminar pasando por la calculadora de conveniencia política.