VALÈNCIA. La suerte está echada y los votos emitidos. Restan horas para la gala de los Premios Goya 2023, que se celebra este sábado, 11 de febrero, en Sevilla. Este año la decisión en muchas categorías está reñidísima con una colección de filmes que han conseguido tener presencia en todos los grandes festivales de la temporada.
Con todo esto, las nominaciones valencianas se sufren aún más. Las razones: la falta de un lobby en la Academia de Cine o un sector que progresa pero que aún le cuesta competir con otros cines más asentados. En todo caso, este año un largometraje valenciano brilla de manera especial: es El agua, que ya obtuvo grandes críticas en la Quincena de Realizadores de Cannes y, aunque de manera discreta, ha conseguido llegar hasta la terna final en dos categorías.
Este jueves, 9 de febrero, hubo un encuentro con la mayoría de nominados en el edificio Rialto con la consellera de Cultura, Raquel Tamarit, que expresó: “Las nominaciones con sello valenciano nos afianzan el camino para fortalecer nuestro sector audiovisual, con el que trabajamos para cohesionarnos como equipo, porque queremos tener voz y que sea una voz importante allá donde vayamos”. Este diario analiza, a partir de las quinielas, qué posibilidades hay de que alguna o algún cineasta valenciano vuelva el fin de semana con un cabezón en la maleta.
María Zamora, por Alcarràs, a mejor película
La gran incógnita de la noche, sin duda alguna. Alcarràs se estrenó con la práctica unanimidad de que sería la película del año, más aún con el aval del Oso de Oro de Berlín. Carla Simón superó cualquier expectativa, a pesar de haber dejado el listón bien alto en Estiu, 1993. De esto ya hace meses, y desde entonces se han estrenado un puñado de otras buenas películas que podrían hacerle sombra. El foco está puesto en As bestas, como opción que une crítica y gran público. También en Cinco lobitos, aunque también se ha desinflado un poco esta opción desde el consenso que despertó en su estreno en plataformas.
Con todo esto, María Zamora y su equipo tiene motivos más que suficientes para la esperanza. La Academia eligió Alcarràs para representar España en los Óscar y no ha habido título patrio que haya llegado tan lejos en estrenos internacionales.