ALICANTE. El nuevo inquilino del parque de Canalejas de Alicante abre al público. Xiringuito Group (que ya gestiona otro quiosco en el paseo del Postiguet) acaba de poner en funcionamiento el edificio municipal de uso hostelero situado a la altura del cruce con la calle Alemania, tras hacer efectivo el acuerdo de concesión por el que se convirtió en adjudicatario de su explotación.

El establecimiento, bajo la denominación de Kiosco La Silva 1886, es un local "con esencia de bistró, inspirado en los kioscos mediterráneos" en el que, según fuentes del grupo, se pretende ofrecer "buen café, una cuidada selección de vinos y algo para picar". Todo ello con la posibilidad de disfrutar del espacio del parque, con un horario de servicio comprendido entre las 10:00 y las 20:00 horas que se prevé ampliar en función de cada temporada, según apuntan portavoces del grupo.

El quiosco se compone de un primer edificio de forma circular, que se complementa con un segundo módulo en el que se encuadran los baños. Además, de por su diseño -con un formato circular- el quiosco se caracteriza por disponer de una amplia zona de terraza en la que se distribuyen alrededor de una veintena de mesas.

Su instalación se produjo con motivo de las obras de reurbanización de la avenida de Ramón y Cajal acometidas durante el pasado mandato. Su inclusión en el proyecto -que motivó la presentación de alegaciones vecinales en las que se expresaba su rechazo al quiosco- se planteó como elemento de dinamización del parque, aunque -tras el retraso en la convocatoria del concurso para concertar su gestión- no había llegado a entrar en funcionamiento hasta ahora, más de un año y medio después de que concluyesen las obras.

Xiringuito Group se hizo con la explotación del edificio municipal a través de la empresa Romeska Costa el pasado mes de septiembre, tras ofertar un canon de 803.000 euros, como informó este diario. La suya fue la segunda propuesta económica más elevada, tras la presentada por la empresa Alicante y Castillo (de los hermanos Luis y Juan Carlos Castillo), que acabó renunciando a su explotación para centrarse en la gestión de otro de los quioscos municipales que también se licitaron en paralelo: el ubicado en la plaza del músico Óscar Tordera. 

La gestora del quiosco de Canalejas se avanza, así, a la puesta en funcionamiento de esa segunda instalación, para la que la empresa Alicante y Castillo habría solicitado la limpieza de los grafitis estampados sobre la fachada del edificio para recibirlo en condiciones óptimas. En principio, la apertura de ese segundo quiosco debería producirse en el momento en el que se procure ese acondicionamiento, todavía sin fecha.