ALICANTE. El grupo municipal de Esquerra Unida Podem en el Ayuntamiento de Alicante ha presentado alegaciones al expediente que declara a Alicante como Lugar de Memoria Democrática, con el objetivo de ampliar el reconocimiento y dar voz a quienes sufrieron la represión franquista. En su propuesta, la confluencia pide que "el reconocimiento incluya espacios cargados de historia para la ciudad, como el Mercado Central, el Puerto de Alicante, el Cementerio Municipal con sus fosas comunes, el antiguo campo de concentración de Los Almendros y el Reformatorio de Adultos de Benalúa", según informan fuentes de la formación política, a través de un comunicado.

"Alicante tiene cicatrices que son también su dignidad. Recordarlas no es mirar atrás, es saber quiénes somos y qué ciudad queremos ser", ha explicado el portavoz de EU Podem, Manolo Copé. Las alegaciones también proponen crear un Centro de Interpretación de la Memoria Democrática, impulsar rutas y señalización de lugares de memoria y abrir la participación a asociaciones memorialistas, centros educativos y universidades. "Queremos que las nuevas generaciones conozcan lo que ocurrió y aprendan el valor de la democracia desde nuestra propia ciudad", ha añadido Copé.

El portavoz ha respondido además a las declaraciones del alcalde Luis Barcala, quien acusó al Gobierno de "centrarse en la memoria histórica y olvidarse de invertir en Alicante". "Lo que demuestra Barcala con esas palabras es una falta total de sensibilidad. Mientras el Gobierno impulsa el reconocimiento de Alicante como ciudad de memoria, él desprecia a las víctimas y a sus familias. No se puede gobernar una ciudad negando su historia", ha añadido Copé.

Crítica a la decisión de PP y Vox

De igual modo, Esquerra Unida Podem ha condenado firmemente la decisión del Partido Popular y Vox en el Consell de transformar el Instituto de la Memoria de Alicante en un espacio "para víctimas de algún tipo de violencia", diluyendo así el objetivo original de reconocer a quienes sufrieron persecución y muerte por la defensa de la libertad y la democracia, según añade la nota pública.

Copé ha calificado este cambio como "una operación de maquillaje político para borrar la memoria antifascista de la ciudad" y ha denunciado que la denominada Ley de Concordia, aprobada por PP y Vox, deroga de facto el Instituto de la Memoria impulsado al amparo de la Ley de Memoria Democrática de 2017.

"Pretenden desdibujar la historia y convertir un espacio destinado a honrar a las víctimas del franquismo en un cajón de sastre que lo mismo sirve para una cosa que para otra. Es una falta de respeto a quienes pagaron con su vida la defensa de los valores democráticos", ha afirmado.

Copé ha señalado que "tras la eliminación de las políticas públicas de memoria democrática en la Comunitat Valenciana, es más importante que nunca que el Estado proteja y mantenga viva la memoria de los que defendieron la libertad frente al fascismo". "No hay futuro sin memoria. Alicante no puede construirse sobre el olvido. Nuestra obligación es recordar y dignificar a quienes nos enseñaron que la democracia se defiende cada día", ha concluido.